Más de 110 millones de personas en el mundo se han visto obligadas a huir de sus lugares de origen debido a la persecución de grupos armados, violencia de género y desastres naturales, de las cuales 35 millones son refugiadas, mientras 75 millones son desplazadas internas, indican cifras del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur).
En la conmemoración del Día Mundial de los Refugiados, definido por la ONU, el representante en México de la Acnur, Giovanni Lepri, subrayó que no es una fecha de fiesta, sino de reflexión, porque este número de desplazamientos forzados muestra lo “dramático y grave” que resulta esa situación para millones de personas en todos los países, de donde huyen para sobrevivir.
“Si la humanidad estuviera bien, no aumentaría el número de personas que buscan refugio. Vamos mal y por eso México está haciendo grandes esfuerzos, porque es la región donde han aumentado mucho las solicitudes de refugio debido a la huida de sus lugares, sobre todo por persecución”, alertó al participar en la jornada para conmemorar este día en el Instituto Mora, en la que se programó la asistencia del subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración, Alejandro Encinas, pero envió a un representante.
Lepri señaló que es muy preocupante que los pobladores abandonen sus países en busca de protección internacional y para sobrevivir, porque eso revela que “como humanidad vamos mal debido a que han aumentado las personas que se encuentran en esta situación, porque sus países no les garantizan protección ni seguridad”.
Apuntó que de los 35 millones de refugiados en el mundo, 36 por ciento se establece en países que se encuentran en la escala más baja de desarrollo económico, lo cual complica su inserción porque el Estado no garantiza sus derechos a la educación, salud o empleo de manera inmediata y batallan para lograrlo.
En nuestro país, la cifra de refugiados aún no es tan alta como en Estados Unidos, pero el titular de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), Andrés Silva Ramírez, informó que ya suman poco más de 100 mil. La mayoría de ellos han solicitado en el país este documento desde 2013 y 87 por ciento han obtenido esta condición en la actual administración.
No obstante, admitió que “cuando ya son refugiados no se les garantizan sus derechos, porque una cosa es el derecho y otra cosa es el hecho. Que logren tener acceso a ellos es complejo, sobre todo a la bancarización, y por ello estamos buscando la manera de hacer mesas temáticas con el Servicio de Administración Tributaria y las instituciones bancarias para facilitar su acceso al RFC y a una cuenta bancaria”.
Advirtió que este año habrá más de 150 mil solicitudes de refugio, pues hasta mayo se habían presentado más de 65 mil, la mayoría de personas que provienen de Haití, aunque sigue un número alto de hondureños y salvadoreños.