Ante las publicaciones de presuntas denuncias archivadas en contra de Marcelo Ebrard por supuestas irregularidades como jefe de Gobierno de la ciudad, el presidente Andrés Manuel López Obrador salió en su defensa porque en el periodo en que se ubican las imputaciones, en el sexenio de Enrique Peña Nieto, fue objeto de persecución porque se le culpaba de haber facilitado información del Registro Público de la Propiedad relacionada con la casa blanca de Peña.
A pregunta expresa del reportero de una revista, dejó entrever intencionalidad para colocar esos asuntos en la conferencia en este contexto de elección del coordinador de los comités de defensa de la Cuarta Transformación.
Por ello pidió que “no se traten estos temas o que me lleven a tratar estos asuntos porque, voy a contestar, ¿eh? Y ustedes son libres, pero sí, no quiero participar y que se sienta que estoy a favor o en contra. Tengo que mantener el equilibrio, estoy obligado a eso, en este caso y también en la elección constitucional”.
Negó conocer un expediente que habría abierto y archivado la entonces Procuraduría General de la República contra Ebrard pero, en la lógica de que “no hay texto sin contexto”, explicó que “sí sabía que Marcelo fue objeto de una persecución en ese tiempo. Por eso es extraño que se haya cancelado un proceso en su contra, porque Marcelo era mal visto por el gobierno anterior, me consta. Tuvo incluso que irse a una especie de exilio voluntario, porque había una lanzada en contra de él”.
Al hacer caso omiso de lo que publicó la revista, advirtió que “no puede haber una denuncia sin tener todos estos elementos, y más en esta temporada en que se está decidiendo o se va a decidir sobre quién va a ser coordinador o coordinadora de la defensa de la transformación”.