Si alguien sale a la calle y pregunta a 10 personas al azar si conoce cómo funciona alguno de los aparatos que manejamos en la vida diaria es probable que dos, tres o hasta cinco puedan dar, por lo menos, una respuesta aproximada. Pero si se pregunta igual a otras 10 si conocen la Constitución de los Estados Unidos Mexicanos, 11 responderán no.
Sobran ejemplos de esa laguna enorme. Uno, que muchos conocen por incómoda, negativa y humillante experiencia. Todos los días las policías municipales se topan con individuos en estado de ebriedad y sin más trámite los detienen y encarcelan para hacer ingresar recursos, a título de multa, a la tesorería del municipio. Otro, que ocurre a ciencia y paciencia de autoridades y ciudadanos: la detención arbitraria de algún vehículo para hacerlo conducir por una grúa al llamado corralón, según establecen descaradamente los reglamentos de tránsito municipal. El artículo 14 constitucional parece no existir: “Nadie podrá ser privado de la libertad o de sus propiedades, posesiones o derechos, sino mediante juicio seguido ante los tribunales previamente establecidos, en el que se cumplan las formalidades esenciales del procedimiento y conforme a las leyes expedidas con anterioridad al hecho”.
En Nuevo León ha nacido un par de programas para intentar cubrir en alguna medida esa falencia nacional. Una, Visión Nuevo León AC, inició hace unas semanas el suyo: Entender y Comprender la Constitución, dirigido a escolares de entre cuarto y sexto de primaria.
Plaza y Valdés editó el título La Constitución de los Estados Unidos Mexicanos para niñas y niños, versión del texto vigente de nuestra Carta Magna, a partir de la visión del magistrado Ricardo Velázquez Cruz: adaptación del original con un lenguaje más llano y comprensible para una lectura infantil. La editorial lo ilustró y le agregó ejercicios y juegos didácticos, así como un glosario.
El senador Napoleón Gómez Urrutia solicitó a la editorial una impresión especial y de la misma donó una cantidad considerable a Visión Nuevo León para que esta organización ciudadana donara a su vez ejemplares a grupos de alumnos en esos grados de los 51 municipios del estado. La maestra Elisa Hernández, directora de una escuela pública, y el señor Agustín Hernández, un ex directivo bancario que dio un vuelco a su vida y se convirtió en activista de causas sociales –ambos pertenecientes a tal organización– se dieron a la tarea planeada, con un agregado a cargo de la maestra Hernández: preparar a un grupo de alumnos de una escuela del municipio de Juárez (a caballo entre el campo y la ciudad) para iniciar la lectura y el estudio de la Constitución. A ese grupo se sumarían luego estudiantes de otros municipios del estado.
La organización ciudadana solicitó su colaboración al Centro de Estudios Parlamentarios de la Universidad Autónoma de Nuevo León, como ha difundido La Jornada, y éste creó un programa complementario: la Asamblea de Niñas y Niños Constitucionalistas de México. Capítulo Nuevo León. Su objetivo es compartirlo con otros estados, en el propósito de que la iniciativa pueda adquirir dimensión nacional.
Un primer paso del centro fue impartir un taller a los niños participantes con el tema “democracia y Constitución”. Posteriormente les hizo un reconocimiento con la participación de las autoridades de los tres poderes del estado y la actuación de la banda de guerra de la séptima Zona Militar. El acto dio pie para que el diputado Mauro Guerra, presidente del Congreso de Nuevo León, invitara al mismo grupo de estudiantes a una sesión en el recinto legislativo.
En ese acto participaron los directivos de las instituciones promotoras de ambos programas y el diputado Guerra, quien explicó a los estudiantes la labor de un diputado.
El siguiente paso, por parte del Centro de Estudios Parlamentarios-UANL, será lanzar el certamen para integrar la Asamblea de Niñas y Niños Constitucionalistas de México. Capítulo Nuevo León. Estará dirigido a los escolares de los grados de cuarto a sexto de primaria de los 51 municipios del estado para integrar la Asamblea de Niñas y Niños Constitucionalistas de México. Capítulo Nuevo León. El certamen consistirá en evaluar a los niños que hayan demostrado mayor capacidad en la enseñanza de la Constitución federal a sus compañeros, amigos, familiares y maestros. Con los testimonios presentados (fotos, videos, testimonios de una autoridad escolar), los concursantes se presentarán a una asamblea a dar una clase como docentes del texto constitucional.
La pareja triunfadora formará parte de la Asamblea estatal mediante el voto ponderado de maestros (mediante un jurado) y el de los demás alumnos participantes, que lo emitirán de manera universal, secreta y directa.
La experiencia de Nuevo León en el conocimiento, aprendizaje y enseñanza de la Constitución en la dimensión infantil podrá servir de referencia a otros estados de la República.