Marcelo Ebrard se registró como aspirante a coordinar los trabajos para la defensa de la Cuarta Transformación. Fue el primero, de los seis que Morena contempla para este proceso interno, y ésta será la segunda ocasión en que el ex canciller se someterá a una encuesta en busca de la candidatura presidencial. En la primera ocasión, para los comicios de 2012, Andrés Manuel López Obrador resultó ganador.
Ayer, al entregar sus documentos, incluida su renuncia como titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Ebrard también se comprometió a respetar el resultado, hacer una campaña austera y no denostar a sus contendientes.
En las encuestas “soy el primero”, presumió acompañado de su esposa, Rosalinda Bueso, quien tuvo que ser auxiliada por Martha Delgado para poder ingresar al salón del registro en medio de empujones entre el staff y reporteros que seguían de cerca al aspirante.
Hoy Ebrard presentará su estrategia e informará sobre la manera en que financiará sus actos, sin descartar, según su equipo, que utilice los recursos obtenidos por la venta de su libro El camino de México, el cual sigue promocionando. Pero rechazó adelantar dónde arrancará la gira, porque “los voy a sorprender”.
Sus recorridos, recalcó, serán “de contacto con las personas, de dialogar y, sobre todo, escuchar con humildad lo que el pueblo de México considera”. Esa, apuntó, debe ser la siguiente etapa de la Cuarta Transformación, “lo que va a permanecer y lo que tenemos que agregar en los próximos años. A eso vamos a todo el país”, afirmó.
A Ebrard lo recibieron decenas de simpatizantes, incluida una botarga de su imagen en caricatura, con consignas de ¡presidente, presidente! Adentro lo acompañaron para su registro, en el hotel capitalino donde se llevó a cabo, una veintena de legisladores y ex funcionarios tanto del gobierno de la Ciudad de México que encabezó, como de la cancillería. Todos, coordinados por la senadora Malú Mícher.
Entre ellos, Martha Delgado, ex subsecretaria para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos, y Manuel Mondragón, ex secretario de Seguridad capitalina.
Aprovechó para pedir a sus simpatizantes eviten campañas sucias o descalificaciones.
Para esta ocasión, Ebrard portó un chaleco guinda con el logotipo de Morena, y desde que bajó de su camioneta, presumió que es el primero de los seis aspirantes que presenta su documentación para inscribirse al proceso.“Al que madruga, Dios le ayuda”.
Más tarde, insistió: “fui el primero que me separé del cargo y soy el primero en las encuestas; tres primeros lugares llevamos”.
Tras entregar su documentación a Mario Delgado, presidente nacional de Morena, se comprometió “formalmente a respetar y respaldar el resultado final del proceso y a dar todo mi apoyo inequívoco a quién resulte coordinador o coordinadora de la defensa de la transformación… en este caso, coordinador”.
Aseveró que promoverá los avances de la Cuarta Transformación y sus postulados. Entre ellos: rechazar y combatir la corrupción en todas sus formar; “evitar que simpatías y animadversiones personales pesen en sus decisiones”; no dejarse llevar “por afanes de venganza”, usar el poder público para servir a los demás y “nunca con propósito de beneficio o enriquecimiento personal” como, dijo, lo ha hecho toda su vida.