Buenos Aires. El partido gobernante de Argentina anunció el miércoles que cambiará su denominación para competir en las próximas elecciones generales de octubre, en medio de las pugnas internas por definir al candidato que buscará suceder al presidente Alberto Fernández.
La alianza electoral entre las distintas corrientes del partido peronista y otras fuerzas afines que en 2019 ganó la presidencia del país sudamericano con la marca “Frente de Todos” pasará a llamarse “Unión por la Patria”.
“Nos unimos para defender a la Patria”, expresó el partido gobernante en su cuenta oficial de Twitter, en la que cambió su denominación. “Nos unimos para recuperar la independencia económica y por el desarrollo de una Argentina Federal”.
Unión por la Patria fue inscrito formalmente este miércoles ante la justicia electoral horas antes de que finalizara el plazo para el registro de alianzas electorales de cara a las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) del 14 de agosto que consagrarán los postulantes para las elecciones generales de octubre.
En tanto que el frente opositor Juntos por el Cambio, que lidera las encuestas, mantendrá su denominación actual para la contienda electoral.
Además de presidente, también se votará por gobernadores, alcaldes, diputados y senadores.
El cambio de nombre busca darle un matiz más competitivo al oficialismo en momentos en que la mayoría de las encuestas le vaticinan una derrota, con el país sumergido en una crisis inflacionaria agravada por una demanda de dólares, que escasean debido a la sequía histórica, que presiona sobre los precios. En este escenario adverso, el presidente Fernández desistió de buscar la reelección.
Unión por la Patria apunta además a maquillar las pugnas internas que dividieron al oficialismo durante los cuatro años de gestión de Fernández, abiertamente enfrentado con su vicepresidenta y exmandataria Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015).
Estas diferencias se recrudecieron las últimas semanas en torno la definición de los precandidatos. Mientras desde el sector liderado por el mandatario impulsan al embajador en Brasil, Daniel Scioli, los allegados a la vicepresidenta postulan al ministro de Interior, Eduardo de Pedro, y al gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof.
Si no hay un acuerdo previo, lo más probable es que el oficialismo resuelva sus candidaturas en las primarias de agosto.