Ciudad de México. Ocultos muchas veces y en otros casos silenciados, los casos de racismo también se han presentado en el futbol mexicano. Desde gritos e insultos hacia jugadores, hasta despidos y polémicas en el arbitraje, han sido algunas de las maneras en que se ha manifestado este tipo de discriminación en las canchas de la Liga Mx.
“En México, hay mucho racismo oculto”, dijo Adalid Maganda, el ex silbante afrodescendiente que denunció en 2018 al entonces presidente de la Comisión de Arbitraje, Arturo Brizio, por haberlo insultado y discriminado.
“He visto que en España tanto jugadores como clubes y directivos arroparon y respaldaron a Vinicius Jr. Aquí nadie se solidarizó conmigo, ni equipos, jugadores o árbitros, por miedo a perder su trabajo, a que los directivos ya no los renovaran”, lamentó Maganda.
Después de recurrir a instancias legales, Maganda retornó a dirigir en la Liga Mx. Sin embargo, aseguró, fue recibido con insultos y actos hostiles en defensa de Brizio por parte de compañeros que ahora se encuentran en puestos de mando.
Esta situación no le sorprende a Maganda, al recordar que si bien la federación ha realizado campañas contra el grito homofóbico “eeeh… puto”, otro acto de desprecio, “lo ha hecho porque toca sus bolsillos y ganancias económicas” con las sanciones impuestas por la FIFA.
En cambio, hasta ahora no ha realizado acciones concretas contra el racismo. “Hasta ahora sólo dos afrodescendientes han sido seleccionados nacionales y yo el único árbitro, pero perdí el trabajo por alzar la voz”, señaló como ejemplo de la discriminación que aún persiste.
El caso de Maganda fue el más polémico; no obstante, ya había antecedentes de actos de racismo en la Liga Mx. Los entonces jugadores de Pumas Marco Antonio Pikolín Palacios y Darío Verón insultaron en 2010 a Felipe Baloy. El emblemático otrora capitán de los felinos, Verón, también fue acusado cinco años más tarde por agredir a Darwin Quintero.
Poco antes, Quintero también había denunciado a Rogelio Chávez, ex jugador de Cruz Azul, por insultos racistas. Apenas en 2021, Félix Torres, integrante de Santos, aseguró que aficionados del Atlético de San Luis lo habrían agredido con frases discriminatorias.
Actos de dominación
El racismo no es el único acto discriminatorio que ha manchado al balompié en los estadios y en el caso de México se suma también la homofobia con el grito “puto”. Ambos casos representan un acto de “dominación”, explicó la antropóloga social Gabriela Iturralde, colaboradora del Programa de Investigación Afrodescendientes y Diversidad Cultural, del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
“El racismo, machismo, sexismo, homofobia son sistemas de dominación con el propósito de disminuir, sobajar, de no respetar la diversidad de expresiones de la humanidad. Deberíamos pensar que esa diversidad es una riqueza de nuestra sociedad”, apuntó.
El racismo también tiene una afectación en “la movilidad social, ejercicio de derechos y en la dignidad humana”, indicó la especialista.
“No hay que perder la esperanza de erradicar el racismo, pero falta mucho esfuerzo para desarticular estas expresiones. No se trata sólo de decretar leyes que lo sancionen; también es necesario un trabajo del gobierno, en la educación y mayor apoyo al Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación”, sostuvo Iturralde.
Como parte de las acciones para erradicar el racismo y la discriminación, la Dirección General del Deporte Universitario (DGDU) realizó el 25 y 26 de mayo el coloquio Cuerpo, deporte y racismo, el cual coincidió con las denuncias de Vinicius.
“Lo que pasó con Vinicius nos restriega el racismo, pero el futbol no es la única área donde se presenta esta desafortunada situación, aún están muy interiorizadas las nociones de supremacismo. Con este coloquio buscamos una reflexión”, explicó David Vázquez, director de Comunicación Social de la DGDU.