Caracas. La unidad de craqueo catalítico de la refinería venezolana El Palito, clave en la producción de gasolinas, reinició operaciones ayer luego de haber permanecido alrededor de un año detenida, indicaron un diputado oficialista y siete fuentes, reactivación que podría aliviar la escasez de combustibles en el país miembro de la Organización de Países Exportadores de Petróleo.
La refinería El Palito, la más pequeña del país con capacidad para procesar 146 mil barriles por día (bpd) de crudo, es sometida a reparaciones mayores y una expansión, luego de que se firmó un acuerdo de 100 millones de euros con la estatal Compañía Nacional Iraní de Refinación y Distribución de Petróleo.
Trabajadores de la planta, ubicada en la costa central del país, informaron que la unidad de craqueo catalítico fluidizado (FCC, por sus siglas en inglés), empezó con una carga de 20 mil bpd, pero no precisaron el nivel de producción.
“Arrancó la FCC de Ref El Palito y tendremos la gasolina que necesita el país”, celebró el diputado Willian Rodríguez en su cuenta de Twitter.
“Le metieron carga desde la madrugada del domingo. Deben estar por unos 20 mil bpd e irán subiendo hasta llevarla a 40 mil bpd, y creo que no va a dar más de ahí”, detalló un trabajador de la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA).
La única destiladora de crudo de la refinería estaba con una carga de 85 mil bpd.
La producción del FCC de El Palito se suma a los 25 mil bpd de gasolina que procesa el reformador de la refinería Puerto La Cruz, en la costa este del país.
Por la intermitencia en la producción de combustible, los venezolanos tienen que hacer largas filas, y en algunas zonas formarse más de un día, para surtir sus vehículos.
Irán ha provisto al gobierno del presidente Nicolás Maduro de combustibles y diluyentes para convertir su crudo extrapesado en variedades exportables y desde 2020 suministra piezas para reparar el circuito refinador de Venezuela, que tiene capacidad de 1.3 millones de bpd.