El multimillonario financiero George Soros dijo a The Wall Street Journal en una entrevista publicada el domingo, que cederá el control de su enorme imperio de 25 mil millones de dólares a su hijo, Alexander Soros.
“Yo soy más político”, declaró el heredero también en entrevista, por lo que los medios más conservadores de Estados Unidos alertaron sobre las intenciones de Soros de influir en la política nacional e internacional.
En particular, Alex Soros buscaría luchar contra la posibilidad de un regreso del magnate republicano Donald Trump al poder, señaló el WSJ.
Odiado por los ultraconservadores, blanco habitual de ataques con tintes antisemitas, George Soros comenzó a crear en la década de 1980 una red de fundaciones (“Open Society Foundations” u OSF) que invierte en todo el mundo a favor de diversas causas, reformas económicas y judiciales, los derechos de las minorías y los refugiados y la libertad de expresión.
El patronato de la OSF eligió a Alex como presidente en diciembre y ahora también dirige la actividad política como presidente del comité de acción política de Soros.
La fundación destina unos mil 500 millones de dólares al año a grupos como los que defienden los derechos humanos en todo el mundo y ayudan a construir democracias, según informó el diario.