El primer ministro de Perú, Alberto Otárola, pidió este viernes a las autoridades mexicanas que garanticen la seguridad de los diplomáticos peruanos en el país después de que estos hayan denunciado recibir amenazas.

En declaraciones a la prensa desde los exteriores de la sede de la Presidencia del Consejo de Ministros, Otárola ha informado de que se trata de grabaciones telefónicas de carácter "amenazante" e "intimidante", de acuerdo con agencias.

Fuentes del sector diplomático dijeron a este diario que la amenaza fue recibida el 31 de mayo en el teléfono de emergencia del Consulado peruano en la capital del país y que fue dirigida al Encargado de Negocios de la embajada, y que a partir de ello la representación diplomática peruana presentó una denuncia ante las autoridades correspondientes y envió una nota diplomática a la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE). Así mismo, indicaron que en la sede la embajada peruana fue reforzada la seguridad, que está a cargo de las autoridades mexicanas.

El jefe de gobierno de Perú informó que las autoridades han puesto en marcha una investigación para determinar el origen de las mencionadas amenazas, según informaciones recogidas por la emisora peruana RPP.

"He escuchado la grabación, las amenazas son serias. Solicitamos al Gobierno mexicano las garantías para la integridad, la vida de nuestros funcionarios diplomáticos", ha manifestado el primer ministro Otárola.

El jefe de Gobierno ha agradecido a las autoridades mexicanas que hayan "redoblado la seguridad" de los diplomáticos peruanos en el país, si bien ha pedido ir un paso más allá para garantizar su "seguridad, su vida y la integridad".

Según ha publicado Latina Televisión, en las grabaciones se escucha a sujetos desconocidos que exigen a los diplomáticos peruanos que abandonen México o de lo contrario serán sacados del país "en bolsas de basura".

Este incidente se produce en un contexto marcado por las tensiones entre Lima y Ciudad de México después de que el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, haya tildado de "usurpadora" a su homóloga peruana, Dina Boluarte.

Para el mandatario mexicano, el mandato de Boluarte no es legítimo, pues ascendió al cargo después de la destitución y detención de su predecesor, Pedro Castillo, después de un intento fallido de este por arrogarse más competencias.