Los abogados de Pedro Castillo, Raúl Zaffaroni y Guido Croxatto informaron que presentarán el caso del presidente peruano depuesto ante el Sistema Interamericano de Derechos Humanos, “cuya voz haría falta para reivindicar la democracia hoy ausente en Perú”, y advirtieron que es parte de “una guerra híbrida que estamos sufriendo en América, que se suele llamar de golpe blando”.
De visita en el Senado, donde destacaron el apoyo del presidente Andrés Manuel López Obrador, alertaron también sobre el clima “de persecución política, judicial y criminalización de líderes populares” que se vive en el país andino.
“Esto lo hemos tenido en Bolivia, como golpe de Estado; en Ecuador, con una condena pronunciada por jueces nombrados por el opositor político contra el presidente Rafael Correa; contra (Gustavo) Petro, que durante dos años fue suspendido de la alcaldía de Bogotá por un órgano administrativo de Colombia; en Argentina, con la condena infame a Cristina Fernández de Kirchner y, con Lula, naturalmente”, precisó Zaffaroni.
Dijo que la cuestión de fondo en Perú es que “este año vencen todas las concesiones de Fujimori, de explotación minera, de servicios públicos, etcétera, y sabían que Castillo no iba a renovarlas. Cada vez que sucede un episodio de esta naturaleza, hay dinero”, sostuvo.
Mencionó que por la represión “indiscriminada en Perú”, hay 70 muertos y “una multitud de heridos”.
Y “si un Congreso integrado por personas que cometieron delitos de lesa humanidad, como establece el Estatuto de Roma, declaran persona non grata a un presidente (como lo hicieron con el mandatario mexicano, Andrés Manuel López Obrador) que lucha contra el racismo y una destitución arbitraria, es una medalla”, apuntó por su parte Croxatto.
Agradeció al senador César Cravioto (Morena) la apertura para exponer la situación de Perú. “Para nosotros es muy importante el apoyo del Presidente de México y por eso estamos aquí”.
En la medida en que avanzan las investigaciones, sostuvo, se revela que hay violaciones a la Constitución de ese país, persecución contra las protestas estudiantiles, y control de la prensa, por lo que consideró que “el respaldo de las naciones hermanas es fundamental”, ya que afecta a toda la región del continente.
Rafael Barajas, El Fisgón, manifestó que en México también “existe el riesgo de un golpe de Estado blando. Prueba de ello son las denuncias constantes que se han hecho últimamente en el sentido de que la USAID está patrocinando directamente a un sector de la oposición mexicana”.