Chihuahua, Chih. El ex gobernador priista César Duarte Jáquéz (2010-2016) compareció este jueves ante la juez de control Delia Valentina Meléndez Olivas, por solicitud del Ministerio Público que solicitó la ampliación por 12 meses de la medida cautelar de prisión preventiva en su contra, al cumplirse este 2 de junio un año de su extradición a México.

La audiencia de la causa penal 3041/2019 que el exmandatario enfrenta por los delitos de peculado y asociación delictiva, entró en receso a las 21:30 horas de la noche, y la juez convocó a reanudarla a las 9:30 de la mañana del viernes, cuando dará a conocer su resolución respecto a la prórroga de la medida cautelar.

Los abogados defensores pidieron, por cuarta ocasión en lo que va del año, que cambie la medida de prisión preventiva por arraigo domiciliario, con el argumento de que la salud de César Duarte está en riesgo y sufrió un infarto dentro del Centro de Reinserción Social (Cereso) número 1 del municipio de Aquiles Serdán, Chihuahua, el 28 de marzo pasado.

La salud de Duarte está en riesgo por hipertensión y problemas cardíacos, además de problemas de cervicales que le impiden la movilidad y son derivados de un accidente de helicóptero que sufrió en el año 2015, incluso los abogados señalaron como factor de riesgo que el exgobernador padece depresión al estar encarcelado.

En cambio, el Ministerio Público solicitó la extensión de la medida cautelar de prisión en contra del exgobernador, por 12 meses, debido a que no ha concluido para asegurar su asistencia a las audiencias del proceso penal, debido a que fue prófugo de la justicia y tuvo que ser extraditado desde Estados Unidos.

La representación social argumentó que la prisión preventiva puede ampliarse hasta por 12 meses, según lo dispuesto en el artículo 182 del Código de Procedimientos Penales del Estado de Chihuahua.

El Ministerio Público aseguró que el imputado, César D., ha recibido atención médica adecuada dentro del Cereso 1 y los abogados defensores han presentado reportes médicos con resultados “falsos positivos” sobre supuestas crisis de hipertensión y el mencionado infarto.

Además, hay reportes de que el imputado ha rechazado ingerir los medicamentos proporcionados por el personal de salud del Cereso 1, “si llevara a cabo bien su tratamiento y tuviera su dieta en orden, hecho que se puede garantizar en el Cereso, la representación social advierte que no tendría riesgos de salud”, señaló un agente del Ministerio Público.

César Duarte Jáquéz es acusado de un desfalco de 96.6 millones de pesos que desvió de las arcas públicas hacia sus empresas: Unión Ganadera Regional División del Norte y Financiera División del Norte cuando fue gobernador de Chihuahua, a través de la simulación de apoyos a productores pecuarios.