China se convertirá en el mediano plazo en la principal economía del mundo, por lo cual este lunes diversos especialistas hicieron énfasis en la importancia de fortalecer lazos económicos con el gigante asiático, particularmente mediante la Alianza del Pacífico, conformada por México, Chile, Perú y Colombia.
Durante el sexto Seminario Internacional América Latina y el Caribe y China, Geneviève Marchini, investigadora de la Universidad de Guadalajara, enfatizó que actualmente el país de la Alianza que más inversión directa de China recibe es Perú, mientras México ocupa la segunda posición, aunque ese indicador crece de prisa.
Enfatizó que si bien los cuatro países de la Alianza del Pacífico tienen en el sector energético el mayor interés económico de China, México tiene una gran y mejor diversificación, pues se pueden encontrar empresas del gigante asiático en sectores claves como manufactura, electrónico y autopartes.
En tanto, en Chile prácticamente toda la inversión china es en el sector energético, mientras en Perú la IED de China en ese rubro se ha más que duplicado desde 2019.
“En el caso de México hay que subrayar la inversión de China en el sector manufacturero, la cual ha generado una gran integración de ambas naciones en las grandes cadenas de valor internacionales”, apuntó la especialista.
Indicó que las cifras muestran que en la década reciente el valor agregado de China en las exportaciones mexicanas ha ido subiendo desde 2.8 a 7 por ciento.
Especialistas de diversas casas de estudio como UNAM, Tec de Monterrey, UAM, UDUAL, BUAP, Universidad de Guadalajara, entre otras, coincidieron en que tras 50 años de la relación diplomática entre México y China se ha logrado un proceso significativo de maduración y complejidad, tanto en su extensión como en su profundidad.
Estos avances, indicó Enrique Dussel Peters, coordinador general y líder del eje temático economía, comercio e inversión de la Red Académica de América Latina y el Caribe sobre China, se deben en la misma medida a la propia evolución nacional y al desarrollo bilateral.
“En estas cinco décadas la presencia de China en América Latina y el Caribe, y desde luego en México, ha sido una de las más notables características internacionales desde las últimas décadas del siglo XX, en prácticamente cualquier ámbito imaginable”, apuntó.
No obstante, indicó que partiendo de la maduración, extensión y profundización de esta relación bilateral, es también importante reconocer retos y diferencias durante estas décadas, pues cuestiones como las negociaciones bilaterales en el contexto de la adhesión de China a la Organización Mundial del Comercio en 2001 y la cancelación del proyecto del tren de alta velocidad Querétaro-Ciudad de México en 2015, por mencionar dos recientes, generaron importantes tensiones bilaterales que lograron paliarse con el tiempo.
El seminario continúa este martes 30 y miércoles 31 de mayo con diferentes ponencias a cargo de especialistas en comercio y relaciones entre China, México y América Latina.