Guadalajara, Jal., Siete personas, de 20 a 40 años de edad –cinco hombres y dos mujeres– están desaparecidas desde el 20 del mes en curso, denunciaron sus familias ante autoridades. Todos laboraban en un call center, ubicado en el municipio de Zapopan, el cual carecía de permisos para funcionar.
La fiscalía estatal dio a conocer que en tres casos hay evidencias de que habrían sido privados de la libertad por presuntos criminales.
Ayer, alrededor de 100 personas, entre amigos y familiares de esos jóvenes, marcharon en Guadalajara, de la glorieta de La Minerva hacia Casa Jalisco (residencia oficial del gobernador), la cual estaba rodeada de vallas metálicas.
Parte del grupo manifestantes, en particular los parientes, anunciaron que se quedarán de manera permanente a las afueras de Casa Jalisco hasta que las autoridades logren resultados palpables y sus seres queridos no queden como cifras que sumar a los más de 15 mil desaparecidos en Jalisco, primer lugar nacional en este delito.
La fiscalía dio a conocer el sábado que las primeras denuncias se recibieron el 23 de mayo por la ausencia de Itzel Abigail y su hermano Carlos David Valladolid Hernández, así como Carlos Benjamín García Cuevas, desaparecidos desde el 20 de mayo.
El día 24 se alertó por la ausencia de Jesús Alfredo Salazar y Arturo Robles Corona, de 37 y 30 años, respectivamente. Un día antes se pidió conocer el paradero de Mayra Karina Velázquez Durán, de 26 años, y ayer se recabó la denuncia por la desaparición de Jorge N, aunque las autoridades omitieron más datos.
El lugar donde trabajaban se ubica en Víctor Hugo 158, colonia Jardines Vallarta, donde las autoridades ya hicieron un cateo, entre jueves y viernes. Ayer efectuaron otra revisión en Johannes Brahms 260, colonia La Estancia, donde al parecer había otro call center en el que trabajaba una de los siete desaparecidos, Mayra Karina, de 29 años, madre de un niño de 11 años y quien conocía al resto de ausentes.
Modalidad violenta
El fiscal estatal Luis Joaquín Méndez Ruiz indicó además que por lo menos en tres casos, hay evidencia testimonial y videograbada de que las personas sufrieron privación ilegal de la libertad. “Preliminarmente, por lo menos en dos o tres de los casos sí se da con la modalidad violenta”, refirió, y señaló que fueron obligados a subir a vehículos “con despliegue similar y todas las características del crimen organizado”.
También dijo que durante el cateo a la oficina de Jardines Vallarta encontraron manchas de sangre, En los dos domicilios se han recabado indicios sobre todo documentales que refieren que la empresa se dedicaba a la venta de tiempos compartidos y al cobro de créditos e hipotecas vencidas, tanto a empresas y particulares nacionales como extranjeros.
“De la información que tenemos en las denuncias dimos con el propietario de la finca cateada en Jardines Vallarta, rindió su declaración, se cruzó información con datos que ya tenía la Policía de Investigación.
Nos dio el nombre de la persona a la que rentó el inmueble, lo estamos buscando, ya agotamos (investigaciones) en Ixtlahuacán del Río, Zapopan, El Salto, Guadalajara y Tlaquepaque”, agregó Méndez Ruiz, quien aseguró que se trabaja “sin descanso” para encontrar a los desaparecidos con vida.
Las familias de los jóvenes criticaron que de nuevo que el gobernador Enrique Alfaro “prefiera el balón” y se vista con el uniforme de las Chivas del Guadalajara y festeje en redes sociales la llegada a la final del conjunto, “en lugar de mostrar empatía con las víctimas y lograr un protocolo eficiente que disminuya un problema que durante su gobierno aumentó de forma alarmante.”