Ciudad Victoria, Tamps., El titular de la Secretaría de Salud de Tamaulipas, Vicente Hernández Navarro, afirmó que aún no hay elementos para responsabilizar a los especialistas que anestesiaron a 23 personas que se realizaron alguna cirugía en dos clínicas privadas del municipio de Matamoros, clausuradas por casos detectados de meningitis fúngica.
Destacó que los médicos de esas unidades están localizados, sobre todo la que aplicó anestesia a un grupo de 43 pacientes, del que forman parte los 23 probables casos, incluido el de la persona que falleció en Brownsville, Texas.
“No tenemos elementos para señalarlos, pues ellos prestaron un servicio profesional, incluso la anestesióloga que aplicó el medicamento al grupo de donde salen los 23 probables contagios de meningitis micótica, trabaja en el hospital Alfredo Pumarejo”, de la Ssa estatal, en Matamoros, y en donde se llevan a cabo los análisis a pacientes que se practicaron cirugías en las clínicas particulares.
En entrevista, el funcionario expresó preocupación porque el hongo que invade el sistema nervioso central causa una serie de malestares que pueden ocasionar la muerte. Ofreció dar seguimiento puntual a las 42 personas que recibieron el medicamento de una misma especialista.
Asimismo, refirió que la dependencia a su cargo y la Comisión Estatal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (Coepris) presentaron una denuncia de hechos ante la Fiscalía General del Estado por presuntas irregularidades detectadas en las dos clínicas particulares de Matamoros que fueron clausuradas entre el 13 y el 15 de mayo por los casos de meningitis.
La querella, explicó, está basada en lo que está ocurriendo con los pacientes, sus funciones normativas, documentación en regla, así como las cédulas profesionales y de especialidad, entre otros.
Mercado negro
Sobre todo, indicó, indagarán la procedencia del medicamento utilizado para las anestesias (de bloqueo neuroaxial), dónde lo compraron y la trazabilidad de los insumos médicos. “Por ello es necesario que se haga una investigación judicial, pues no se puede descartar que las anestesias provengan del mercado negro”.
Aclaró que no se ha encontrado alguna evidencia o documento de que las clínicas tengan laboratorios y farmacias, o de los laboratorios donde se hicieron las compras, ni el lote del medicamento.
“Tampoco hay un paciente que haya promovido una denuncia contra esas unidades médicas y sus dueños”. Por ese motivo, señaló, “no se descarta que las anestesias provengan del mercado negro”.
Añadió que a raíz de los contagios identificados, se hacen revisiones a otras clínicas de cirugías plásticas en las ciudades fronterizas de Tamaulipas.
El jueves, la Secretaría de Salud federal dio a conocer que se identificó a 547 personas a las que, entre el primero de enero y el 13 de mayo pasados, les hicieron alguna cirugía o procedimiento con anestesia en las dos clínicas privadas de Matamoros, limítrofes con Brownsville, Texas, con resultado de 23 casos probables de meningitis.
De éstos, cinco están confirmados, un paciente falleció y se investiga un segundo deceso, ambos en Estados Unidos. Además, de este total, nueve residen en ese país y 14 en México.