Ciudad de México. Estudiantes de la Preparatoria 3 de la UNAM tomaron ayer por segundo día consecutivo el plantel para exigir que un grupo de maestros, a quienes responsabilizan del suicidio de una alumna por presuntos actos de bullying, sean sancionados por las autoridades universitarias.

Los jóvenes convocaron ayer a un acto público frente a las instalaciones escolares para explicar que el lunes iniciaron un paro de 48 horas –el cual termina hoy a las 6 am– en protesta por el ambiente de “acoso, burlas y hostigamiento” de parte de al menos tres profesores.

Con el rostro cubierto, los manifestantes responsabilizaron a los maestros Luz Marina Castro Calva, María Gabriela Reveles Ramírez y Daniel Calvillo González de actos de bullying que llevaron a la estudiante Ietza Abril Soler Cano a quitarse la vida el pasado 25 de abril.

Asimismo, denunciaron que las autoridades escolares han tenido actitudes “burlonas” con ellos y no han tomado en serio sus exigencias de sancionar a los docentes a quienes responsabilizan de los hechos.

Instaron a sus compañeros a presentar denuncias formales contra los profesores mencionados para que los directivos de la UNAM investiguen las quejas por supuesto maltrato contra los alumnos del plantel Justo Sierra.

Liliana Cano Terán, madre de Ietza Abril, confirmó en entrevista con La Jornada que su hija fue víctima deacoso y detalló que en el celular de la menor encontró mensajes que decían: “Marina, Calvillo y Reveles son los que me atormentan”.

En otros textos, la joven habría escrito: “Me agota mentalmente estar en la prepa. Apenas entro y ya estoy triste, enojada, cansada y ansiosa” y “Le caigo mal a Calvillo, porque como soy mujer, el estereotipo dicta que debo ser muy delicada con el cuaderno y no soy así”.

De acuerdo con la mujer, su hija “Ietza Abril se deprimió por los malos tratos y las humillaciones. Lamentablemente ella no me comunicó cómo era la situación, porque (los directivos del plantel) les dicen a los chicos que están en la UNAM y ellos ya deben autogestionarse”; de forma contradictoria, cuando los jóvenes están decididos a presentar una queja, les exigen ir acompañados de su padre o tutor para cumplir con dicho trámite.

Luego de manifestar que las autoridades de la Prepa 3 supuestamente tratan de desincentivar las denuncias contra maestros, Cano Terán recalcó que ella exige la rescisión de contrato de los docentes a quienes acusa de maltrato y acoso contra su hija.

Por su parte, la dirección de la escuela emitió un comunicado el lunes pasado en el que se compro-metió a “dar seguimiento a los procesos jurídicos iniciados en el plantel” en este caso, y reiteró su disposición al diálogo “como medio para alcanzar la solución de conflictos”.