La Compañía de Jesús se solidarizó con la Orden de San Agustín (OSA) y la Arquidiócesis de Morelia, por el asesinato de Fray Javier García Villafaña, párroco del pueblo de Capacho, en Michoacán, quien fue asesinado el pasado 21 de mayo en la carretera entre Cuitzeo y Huandacareo, mientras se dirigía a celebrar la misa con la comunidad.
“Pedimos para que Dios les conceda el consuelo y la paz en estos momentos tan dolorosos ante la pérdida de Fray Javier”.
Los jesuitas “condenaron el lamentable suceso y exigimos a las autoridades que el caso sea investigado de forma diligente y que no quede en la impunidad. Hacemos un llamado a que se revise el modelo de seguridad que ha dejado vulnerable a muchas localidades del país”.
Expresaron que “la violencia continúa en gran parte del territorio nacional, y a casi un año del asesinato de nuestros hermanos jesuitas Javier y Joaquín en la Sierra Tarahumara, recordamos que, en las últimas tres décadas más de 70 religiosos han sido asesinados en México”.
Aseveraron que seguirán “luchando por la tan anhelada paz y justicia”.