El presidente Andrés Manuel López Obrador respaldó ayer la propuesta anunciada por Morena en la Cámara de Diputados de realizar una consulta para preguntar a la población si apoya una reforma que permita elegir por voto directo a los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
Incluso, el mandatario planteó una posible pregunta, que incluye a jueces y magistrados: “los mismos ministros, de acuerdo con la ley, son quienes deben revisar la pregunta, y es muy sencilla: ¿Quieres que se elija a los jueces, los magistrados, los ministros de la Corte que forman parte del Poder Judicial, sí o no? Ahí está la pregunta ya, y a votar”.
Sin embargo, en la conferencia matutina señaló que la oposición intentaría bloquear el ejercicio, al llamar a no participar.
Apuntó que se deben revisar las limitaciones que marca la ley en esta materia, principalmente por estar próximo el proceso de las elecciones de 2024, pero “si hay tiempo y está permitido, sería bueno”.
El martes, la fracción de Morena en San Lázaro convocó a un parlamento abierto para que ministros en funciones y en retiro presenten sus opiniones sobre la viabilidad de que los integrantes de la Corte se designen mediante el voto ciudadano.
Los diputados morenistas anticiparon que pedirán a la próxima presidencia de la mesa directiva de la Cámara que haga la solicitud de consulta popular.
El Poder Judicial “está podrido”, ratifica
“¿Por qué no preguntarle a la gente?”, planteó el mandatario en la mañanera. “¿Por qué no consultar a los ciudadanos?, y que los expertos constitucionalistas, muy defensores de estos aparatos de élite, opinen, den sus argumentos, y quienes sostenemos que el pueblo debe participar en estas decisiones, que la política es asunto de todos, también podamos argumentar sobre la importancia de que los ministros de la Corte, los magistrados, los jueces, sean electos, los elija el pueblo, con voto universal, directo, secreto; que no los elija o nombre la élite del poder”.
A la vez, el mandatario reiteró su crítica al Poder Judicial, el cual, dijo, “se puede probar que casi en su totalidad, de arriba a abajo, está podrido, que solamente sirve a los potentados y a los delincuentes, que no imparte justicia en beneficio del pueblo; entonces, sí hay que renovarlo”.
En un análisis sobre el desempeño de este sector, refirió que “cuando se constituyó el PRIAN”, durante el sexenio de Carlos Salinas, “parte de las concesiones entregadas al PAN fueron espacios en el Poder Judicial. Entonces empezaron a llenar los juzgados de abogados conservadores filopanistas”.
El gobierno siguiente, de Ernesto Zedillo, “llegó a entregarle la Procuraduría de Justicia a un abogado panista, y pues se entregó prácticamente todo el Poder Judicial”.
Subrayó que el Judicial es “un poder al servicio de la oligarquía” que no sabe impartir justicia para la mayoría del pueblo, mientras hay juezas y jueces que son “los reyes y las reinas del sabadazo”, al dejar libres a “personajes famosos” justo en los fines de semana.