A casi dos semanas de los comicios en el estado de México y en Coahuila, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) en la Comisión Permanente trató de hacer creer que la elección en la primera entidad se encuentra en un empate técnico. En respuesta, Morena insistió en que le arrebatarán hasta Coahuila.
Los aliados del partido guinda consideraron que en el estado de México “la revancha del 2017 se está construyendo paso a paso: 20 puntos de diferencia tiene la 4T”, dijo la senadora Imelda Castro (Partido Verde Ecologista de México, PVEM), en tanto que Reginaldo Sandoval (Partido del Trabajo) sostuvo que la candidata del PRI “está perdida y el Partido Acción Nacional no la va a ayudar”.
Sin el entusiasmo de los priístas, el diputado panista Jorge Triana condenó “la intromisión ilegal, inmoral, incongruente e hipócrita de Andrés Manuel López Obrador, a través de sus llamados al voto y al no voto”.
El priísta Pablo Angulo sostuvo que pese a los esfuerzos de Morena y sus aliados por “tratar de ganar una elección a todas luces perdida” en el estado de México, las encuestas, “las que han pagado y las que han circulado, ponen una elección cerrada más o menos a cuatro puntos”.
La diputada María del Carmen Pinete (PVEM) explicó que no apoyaron a Armando Guadiana en Coahuila porque atenta contra los principios de su partido. “Es uno de los principales empresarios taurinos en el estado y también con negocios en la industria del carbón”, sostuvo.
Germán Martínez, del Grupo Plural, cuestionó al secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval, involucrado en un escándalo por la presunta adquisición de un departamento a un contratista: “¿Dónde va a votar, en su nuevo depa de Huixquilucan?”