Para que las personas en condición de refugiados puedan integrarse a la sociedad no sólo hay que dotar de más recursos económicos a la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), advirtió el director general de Política Pública y de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, José Luis Calderón Ríos.
También, dijo, es urgente capacitar a los servidores públicos y aumentar el personal del organismo, de lo contrario, será difícil impulsar una política de unión para esta población. Insistió en que la Comar necesita más “herramientas técnicas, financieras y de recursos humanos”.
En la primera reunión Hacia una política pública de integración y reubicación de las personas refugiadas en México, a la que asistieron representantes de los tres órdenes de gobierno, organismos internacionales y sociedad civil, el funcionario alertó que mientras no cuenten con más personal capacitado para atender a personas de otras naciones, será difícil lograr la integración de los refugiados en nuestro país.
A pesar de que los migrantes que transitan por México van en busca del sueño americano, hay quienes optan por solicitar la condición de refugio, algunos porque desean quedarse en el país y otros porque lo ven como la posibilidad de moverse libre y legalmente por el territorio nacional.