Alrededor de 7 mil grandes contribuyentes (40 por ciento del total), como se conoce a las empresas que tienen ingresos por más de mil 650 millones de pesos al año, no pudieron presentar los dictámenes fiscales a sus estados financieros, un requisito cuya omisión o entrega extemporánea puede devenir en multas y una mayor fiscalización, explicaron integrantes del Instituto Mexicano de Contadores Públicos (IMCP).
Laura Grajeda, presidenta de la asociación gremial, acusó que gran parte del problema se debió a intermitencias y fallas para cargar información en el aplicativo que el Servicio de Administración Tributaria (SAT) dispuso para este objeto. Los problemas se documentaron la tarde del 15 de mayo, último día que tenían estas grandes empresas para presentar los informes.
Las intermitencias en el aplicativo se hicieron evidentes luego de que integrantes del IMCP intentaran cabildear con las autoridades fiscales una prórroga a la obligación. En la reunión estuvo presente Antonio Martínez Dagnino, jefe del SAT, pero se rechazó la propuesta de los contadores, por considerar que se tuvo suficiente para presentar los dictámenes.