Ciudad de México. Entre acusaciones de nepotismo y falta de gestión de servicios ciudadanos, el alcalde de Gustavo A. Madero, Francisco Chíguil compareció este miércoles ante diputados del Congreso de la Ciudad de México.
El diputado Diego Garrido del Partido Acción Nacional presentó un esquema de una presunta red de nepotismo encabezada por Enrique Rodrigo Rojas Serafín, director general de Asuntos Jurídicos y de Gobierno, cuyos primos, hermanos, dos cuñados y un sobrino son parte de la nómina de la alcaldía.
Al recordar que el hermano de Garrido, Mauricio Garrido es director General de Gobierno y Asuntos Jurídicos de la alcaldía Miguel Hidalgo, Chíguil defendió los nombramientos al asegurar que quien está en su gobierno es por su profesionalismo y manera de resolver problemas; no obstante, reconoció que el caso se está investigando en el Tribunal de Justicia Administrativa.
El alcalde criticó al Instituto Electoral de la Ciudad de México porque a su consideración “se ha vuelto un órgano auditor” del presupuesto participativo, que es un recurso que debe elegir la ciudadanía a través de una consulta para elegir proyectos de mejora urbana.
Pese a las críticas de que las alcaldías promueven proyectos afines para realizar labores que les corresponde por ley, Chíguil celebró que “la gente está decidiendo mejor” porque eligen proyectos como instalación de luminarias, arreglo de banquetas, reencarpetado, sustitución de drenaje y mejoramiento de espacios públicos, “y esto ayuda mucho porque son 200 millones de pesos”.
“No es que no esté de acuerdo con los organismos autónomos, absorben mucho recurso, y hay veces que tienen que justificar. En el caso del presupuesto participativo, por ejemplo, el Instituto Electoral se ha convertido en un órgano auditor cuando ellos tienen que organizar otras tareas, y tenemos que recuperar y facilitar para que nosotros podamos ejercer mejor este presupuesto participativo porque el procedimiento es muy largo y se generan subejercicio”.