Los presidentes de México, Andrés Manuel López Obrador, y de Estados Unidos, Joe Biden, tendrán hoy una conversación virtual para hablar de migración, fentanilo y cooperación económica.
El intercambio tendrá lugar a dos días de que la Casa Blanca ponga fin a las restricciones migratorias del llamado Título 42 –que permiten la expulsión inmediata a México de migrantes no mexicanos por razones de salud– y ante lo que las autoridades estadunidenses temen un incremento de los flujos de extranjeros sin documentos hacia su territorio.
En la mañanera de ayer, el mandatario informó que la videollamada será alrededor de las nueve y media de la mañana.
“Los temas, les informo, son migración, fentanilo y cooperación económica para el desarrollo. Hemos estado buscando comunicarnos, pero no se había dado la posibilidad porque andábamos viajando y ahora ya se acordó esto. Vamos a seguir hablando sobre la cooperación que tenemos, que es muy buena, y vamos a mantener esta relación.”
El martes de la semana pasada, la asesora en Seguridad Nacional de la administración Biden, Elizabeth Sherwood-Randall, fue recibida por el mandatario mexicano y funcionarios de su equipo en Palacio Nacional, donde uno de los temas que Washington puso sobre la mesa fue el migratorio.
En relación con el temor estadunidense, López Obrador rechazó la semana pasada que por el fin del Título 42 la cantidad de migrantes vaya crecer en la frontera.
Datos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos registran que en los últimos seis meses fueron detenidos en su intento por cruzar de manera irregular su frontera un millón 223 mil 67 migrantes de distintas nacionalidades, un promedio de 6 mil 700 al día.
El jefe del Ejecutivo volvió a exhortar a los extranjeros a seguir las vías regulares que ha dado a conocer la Casa Blanca para llegar a ese país y no arriesgarse a la travesía migratoria.
Frente al endurecimiento de las medidas antimigrantes anunciadas por el gobernador de Texas, el republicano Greg Abbot, que informó del despliegue de una nueva unidad de la Guardia Nacional que operará con helicópteros y que se preparan leyes para considerar un “delito grave” la migración irregular, el mandatario mexicano ironizó: “Un día (el texano) dice una cosa y luego otra. Primero echaron a andar ahí un programa para revisar frenos de los camiones y afectó el comercio. Luego, de manera inhumana y vil, empezaron a llevar migrantes en la época de frío a Nueva York, a Washington, a la casa de la vicepresidenta de Estados Unidos (Kamala Harris). Esto lo hicieron los republicanos, algo que verdaderamente los degrada en lo moral, en lo humano”.
Ahora, refirió, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, también ha tomado “medidas represivas e inhumanas” contra este sector porque quiere ser candidato de nuevo.
Sugirió a los mandatarios de esos estados dejar de lado sus posiciones contra los migrantes y mejor regulen la compraventa de armas.