Los menores recursos destinados a inversiones físicas, centradas en Petróleos Mexicanos (Pemex), y en Turismo, por el Tren Maya, marcaron los subejercicios reportados por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) durante el primer trimestre de 2023. Al respecto, el subsecretario del ramo, Gabriel Yorio González, enfatizó que “el programa económico de este año está blindado, no tiene desviaciones ni por el lado de los ingresos ni por el lado del gasto”.
Durante los tres primeros meses del año, el gasto neto pagado fue de un billón 868 mil 156 millones de pesos, monto inferior en 190 mil 527 millones de pesos a lo previsto en el programa, y también 3.7 por ciento por debajo de lo registrado en el periodo comparable de 2022, consignó la dependencia.
La mayor parte del subejercicio, 160 mil 955 millones de pesos, correspondieron a gasto programable, rubro en el que se concentran los recursos destinados a proveer de bienes y servicios a la población, incluido el financiamiento de programas sociales, y en general a la operación de las dependencias.
Rebajan costos
Hacienda exhibió que durante el primer trimestre del año los ingresos de Pemex se quedaron 60 mil 660 millones de pesos por debajo de lo programado. Como contraparte, la petrolera encabezó los subejercicios del periodo, con un rezago de 41 mil 740.8 millones de pesos, debido al menor gasto pagado en inversiones físicas y servicios generales.
En Turismo, ramo bajo el cual se encuentra el proyecto del Tren Maya, el rezago del primer trimestre alcanzó 38 mil 735.3 millones de pesos, 73.1 por ciento debajo del programa. Al margen de la planeación del periodo, Hacienda publicó un ajuste de 4 mil 63 millones de pesos para el presupuesto anual del proyecto ferroviario, se apunta que pasó de 143 mil 73 millones de pesos, según lo aprobado, a 139 mil 10 millones de pesos para todo 2023.
Rezago en obras de infraestructura
Consultado sobre el recorte al gasto programable por 117 mil 249 millones de pesos para 2023, publicado por la SCHP en los Precriterios de política económica, y sobre qué ramos se harían los ajustes, Yorio González evadió ese punto y se concentró en el rezago de las erogaciones para el primer trimestre del año.
Justificó que se está a inicios de año, y más allá de la ejecución presupuestal en nóminas y el pago de deuda, que son muy claras, “los proyectos de infraestructura a veces tienen algunas variaciones que son naturales en el ejercicio”. No obstante, recalcó que “no se van a hacer ajustes en el gasto, más bien se va a ir ajustando para compensar de manera estacional”. Y en caso de que hubiera desviaciones, tendrán una “repercusión importante en el resultado de los balances hacia el final del año”.
Al margen de lo que el subsecretario no contestó, los precriterios marcan que “ante la expectativa de menores ingresos presupuestarios y con el objetivo de seguir garantizando la sostenibilidad de las cuentas fiscales, se estima una disminución del gasto neto presupuestario de 131 mil 537 millones de pesos respecto al monto aprobado. Al interior, se prevé una disminución en el gasto programable en 117 mil 249 millones de pesos”.
Alejandra Cañizares Tello, titular de la Unidad de Política y Control Presupuestario de la SHCP, explicó que lo reportado en los precriterios “es una estimación de cierre en términos de lo pagado, (...) de materializarse dicho escenario, se garantizaría que no hubiera afectación en rubros con un impacto directo en el bienestar de la población, además de que no se afectaría la continuidad de las erogaciones destinadas a los programas sociales, ni tampoco las relacionadas con los proyectos de inversión estratégicos”.