Colectivos feministas se manifestaron ayer afuera de las oficinas de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), en la colonia San Jerónimo Lídice, para exigir una mesa de diálogo con los familiares de Karla Tello y Magda Soberanes, quienes estuvieron encarceladas 10 meses en el penal de Santa Martha por la toma del inmueble de este organismo, ubicado en la calle República de Cuba.
Señalaron que ahora la CNDH y el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) las acusan por daños a bienes de la nación, por lo que exigieron que “cese el hostigamiento judicial” contra ellas y retiren las denuncias.
Asimismo, las manifestantes reivindicaron la protesta del llamado Okupa Cuba, que comenzó en septiembre de 2020 y terminó en abril de 2022. Expusieron que esa acción “fue completamente legítima por su indolencia y su ineficacia ante las violaciones de los derechos humanos que todo familiar de víctima de feminicidio debe enfrentar en su búsqueda por la justicia”.
Como parte de su protesta bloquearon por varias horas los carriles laterales de Periférico Sur e hicieron pintas en la fachada de la CNDH y en el pavimento.