La junta de gobierno del Banco de México (BdeM) evalúa hacer un alto a los aumentos a su tasa de referencia –en su próxima reunión de política monetaria, en mayo– ante la disminución que muestra la inflación, reconoció Victoria Rodríguez Ceja, gobernadora del instituto central, quien aprovechó para destacar que el país se encuentra en mejor posición que en el pasado para hacer frente a un complejo panorama económico externo.
Al comparecer este martes ante senadores, enfatizó que el pico de la inflación se dio entre agosto y septiembre pasados, en una ruta, desde entonces, a la baja, alcanzando en abril un nivel de 6.24 por ciento; a lo anterior se agrega que el BdeM alcanzó una postura monetaria restrictiva.
Apuntó que desde que comenzó el ciclo alcista, el banco central incrementó en 7.25 puntos porcentuales la tasa que determina el costo al que se financian en México las empresas y familias, para llevarla a un nivel histórico de 11.25 por ciento.
“La inflación general ya había iniciado una disminución desde agosto del año pasado y ahora la subyacente también ya muestra señales positivas... Tenemos que hacer una evaluación en la junta de gobierno sobre nuestra próxima decisión, pero probablemente no sea una sorpresa la posibilidad de hacer un alto en la tasa.”
Rodríguez Ceja aclaró que la evaluación será únicamente en torno a detener los aumentos, pues aún no se discutirá la posibilidad de una reducción de tasas, dado que primero es necesario consolidar la disminución de la inflación, que es el principal mandato que tiene el BdeM.
Por otro lado, la gobernadora del banco central enfatizó en que condiciones como la disciplina fiscal del país, un régimen de flexibilidad cambiaria que permite la economía ajustarse ante choques y niveles adecuados de reservas internacionales, colocan a la economía nacional en una posición resiliente ante el complejo entorno económico mundial.
“México se encuentra en mejor posición que en el pasado para hacer frente a una coyuntura externa caracterizada por condiciones financieras astringentes derivadas del ciclo de apretamiento monetario a nivel global y por retos a la estabilidad del sistema financiero internacional.”
En este contexto, añadió Rodríguez Ceja, cumplir los objetivos institucionales del BdeM contribuye de manera significativa a la fortaleza y certidumbre del país, por lo que la institución que encabeza corrobora el compromiso con su objetivo prioritario de procurar la estabilidad de poder adquisitivo de la moneda nacional y en un panorama complejo se mantendrá firme en sus esfuerzos por consolidar un entorno de inflación baja y estable para propiciar un mejor ambiente para tomar decisiones a largo plazo en materia de inversión y producción, así como en preservar el poder adquisitivo y el patrimonio de toda la población.
Además, dijo, el banco central seguirá promoviendo un sistema financiero estable, sano y competitivo, así como un sistema de pagos más eficiente que debe reflejarse en mejores servicios financieros y en una mayor eficiencia en la realización de todas sus operaciones en beneficio de la población mexicana.