Moscú. Unidades de la Armada rusa repelieron ayer un ataque ucranio con drones marítimos contra una base naval en la ciudad de Sebastopol, en Crimea.
“El régimen ucranio intentó atacar con lanchas rápidas no tripuladas la base naval de la Flota del mar Negro en la ciudad de Sebastopol. Las fuerzas antisabotaje destruyeron todas las embarcaciones no tripuladas del enemigo”, reportó la Defensa rusa.
El incidente se sumó a otra serie de intentos de atacar Sebastopol, la principal base naval en Crimea, que Rusia se anexionó en 2014.
Las autoridades ucranias no hicieron comentarios sobre este informe. Después de ataques anteriores contra Sebastopol y otras zonas, las autoridades en Kiev no llegaron a atribuirse la autoría, aunque recalcaron su derecho a atacar cualquier objetivo en respuesta a la invasión rusa.
Por otro lado, medios rusos indicaron que antier se encontró un dron explosivo en un bosque, unos 30 kilómetros al este de la capital rusa. Se trata de un aparato UJ-22 Airborn, de fabricación ucrania, y señalaron que el dispositivo se estrelló tras quedarse sin combustible o golpear un árbol. Añadieron que llevaba 17 kilos de explosivos.
Capacidad para hacer daño
Aunque el artefacto no explotó, el incidente subraya la capacidad ucrania de llegar al corazón de Rusia, entre expectativas de que el ejército ucranio emprenderá una contraofensiva de primavera para recuperar zonas ocupadas.
Tropas ucranias se han establecido hace poco cerca de la localidad de Oleshky, margen oriental del río Dniéper, declaró el Instituto para el Estudio de la Guerra con sede en Washington.
Por su parte, las fuerzas rusas continúan con el esfuerzo iniciado hace nueve meses para capturar el bastión ucranio de Bakhmut en la región oriental de Donietsk, al tiempo que el jefe del grupo paramilitar ruso Wagner, Yevgueni Prigozhin, afirmó que sus tropas que luchan en el este de Bakhmut ya no tomarán más prisioneros ucranios, sino que los asesinarán y “destruirán todo en el campo de batalla”.