La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) entregó a directivos de Psicofarma la actualización del reporte de cumplimiento y propuso una ruta que solvente las irregularidades en la fabricación de medicamentos controlados.
De acuerdo con el documento, existe un avance en cuanto a procesos, instalaciones y procedimientos de fabricación, de 50 por ciento en lo correspondiente a la planta de avenida Tlalpan y de 65 por ciento en la ubicada en División del Norte.
El comisionado federal, Alejandro Svarch Pérez, remarcó el compromiso de Cofepris en encontrar soluciones para garantizar el acceso a medicamentos controlados; específicamente los de atención a enfermedades siquiátricas.
Asimismo, llamó a los directivos “a avanzar juntos en seguir una ruta regulatoria en dos sentidos: la liberación de los productos enfajillados, es decir, asegurados, y solventar las sanciones para seguir produciendo”.
Las áreas de Operación y Autorización Sanitaria de la Cofepris han dado “seguimiento puntual al caso del fabricante” y ambas fueron las encargadas de presentar el reporte técnico, “resultado del trabajo de un equipo de dictaminadores especializados, dedicados al análisis de la información recibida, considerando que la agencia sanitaria tiene como prioridad garantizar el acceso a medicamentos controlados”.
La ruta regulatoria tiene como propósito lograr la liberación de medicamentos y seguirá el principio de “liberación útil para el abasto nacional”, esto es, priorizará los de mayor impacto en el abasto e iniciará con las claves de alta prioridad para el sector público y privado.
El reporte señala que “queda pendiente que Psicofarma presente las pruebas de sitio de fabricación y los certificados analíticos por cada lote. Debido a las irregularidades detectadas, estos lotes deben ser analizados en el Laboratorio Nacional de Referencia para garantizar su calidad, seguridad y eficacia”.
Juan Manuel Quijada, director general de Servicios de Atención Siquiátrica de la Secretaría de Salud, compartió que ya se trabaja en crear una ruta que atienda la distribución y suministro a las unidades públicas de atención psiquiátrica.