Al cumplirse 10 meses de los asesinatos de los sacerdotes jesuitas Javier Campos y Joaquín Mora, Jorge Atilano González, encargado del Sector Social de la Compañía de Jesús, lamentó que haya “tanta sangre que corre por el país”, a causa de la violencia e invitó a participar en el encuentro Diálogo Nacional por la Paz, que se realizará en septiembre próximo en Universidad Iberoamericana de Puebla.
Al oficiar una misa en recuerdo de los religiosos, en la Parroquia de la Sagrada Familia, ubicada en la colonia Roma, añadió que así como a la congregación le duelen los homicidio de sus religiosos, también “nos duelen las muertes de nuestros hermanos migrantes en Ciudad Juárez”.
Detalló que en el Diálogo Nacional por la Paz participarán diversos sectores: iglesias, empresarios, gobiernos locales, académicos, jóvenes, mujeres, migrantes, indígenas, organizaciones sociales y víctimas de la violencia.
“Se tendrán paneles que ayuden a comprender la realidad que vivimos y foros sobre buenas prácticas de seguridad ciudadana, justicia cotidiana y reconstrucción del tejido social. Así tejeremos una agenda y una red para construir condiciones de paz en México. Una propuesta a construirse desde la diversidad y la esperanza” y destacó que “somos comunidad y nos necesitamos, juntos abriremos caminos de paz”.
En torno al asesinato de los sacerdotes recordó que “en la madrugada del 22 de marzo me llegó la noticia de que Noel Portillo, responsable del asesinato de los padres Joaquín y Javier había sido asesinado. “Hubo una tristeza, esa no es la justicia que buscamos, no podemos alegrarnos con la muerte de un hijo de Dios, más bien fue un llamado a redoblar esfuerzos en la construcción de condiciones de paz”.
En la homilía expuso que “las personas crecen imitando a otros, el niño imita a su papá, la niña imita a su mamá, así van construyendo su personalidad, ¿a quién imitó Noel Portillo? ¿Por qué lo sedujo la violencia? ¿Qué vacíos había en su corazón que le hizo llenarlo con armas y poder?”
Apuntó que en el país “son tantos los territorios gobernados por hijos sin padres, que es necesario reflexionar juntos sobre la nación que tenemos y que queremos. Por eso hoy más que nunca necesitamos recordar que somos comunidad, que nos necesitamos, que el otro soy yo, que nadie puede quedar marginado, que todos son importantes, y que necesitamos de mucha humildad para reconocer que necesito del otro y por eso es fundamental tener empatía, saber escuchar, saber dialogar, saber consensar, saber tomar acuerdos y saber resolver conflictos”.
Aseguró que “a ejemplo de los apóstoles, ante la muerte de Jesús, nuestro anuncio es de esperanza, mostrando la vida que surge a partir del asesinato de los padres Joaquín y Javier, por eso estamos impulsando los conversatorios por la paz, donde se conversan las heridas que ha dejado la violencia y se abren caminos para la paz.
“Estamos por iniciar los foros justicia y seguridad, que recuperará las buenas prácticas de seguridad ciudadana, de justicia cotidiana y reconstrucción del tejido social en cada uno de los estados del país, y así llegar al Diálogo Nacional por la Paz, que se realizará del 21 al 23 de septiembre en Puebla, donde se construirá una agenda nacional por la paz que oriente la acción en los próximos años”.