Jartum. El ejército sudanés aceptó un cese el fuego de 24 horas a partir del martes por la tarde, según dijeron medios en árabe, horas después de que las fuerzas rivales dijeran que también acatarían la tregua.
Los combates iniciados el sábado han sumido en el caos la capital, Jartum, y otras ciudades de Sudán. Millones de personas en la capital y otras grandes ciudades se refugiaban en sus casas, atrapadas en el fuego cruzado mientras las dos fuerzas se disputaban el control del país y cada general afirmaba que acabaría con el otro.
Las televisoras por satélite Al Arabiya y Al Jazeera citaron declaraciones del oficial militar Shams El Din Kabbashi sobre que el ejército aceptaría el alto el fuego. El canal en árabe de CNN también indicó antes que el ejército participaría en la jornada de tregua, en un reporte que citaba al líder del ejército, el general Abdel Fattah Burhan.
Los avances llegaban al día siguiente de que un convoy de la embajada estadounidense fuera atacado en el país, y mientras las fuerzas rivales seguían atacándose con armas pesadas por cuarto día.
La agresión a la comitiva diplomática, así como los ataques a la residencia del enviado de la Unión Europea y la vivienda del embajador noruego, reflejaban la creciente inseguridad en Sudán.
Los vehículos de la embajada, que estaban identificados claramente, fueron atacados el lunes y los primeros reportes asociaban a los agresores a las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF), el grupo paramilitar que combate contra el ejército del país, indicó a la prensa el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken. Todos los que iban en la comitiva estaban a salvo, dijo Blinken.
Más de 185 personas han muerto y más de mil 800 han resultado heridas, según cifras de Naciones Unidas, que no distinguen entre civiles y combatientes. El Sindicato de Médicos de Sudán informó el martes de al menos 144 civiles muertos y más de mil 400 heridos desde el sábado.
La cifra de muertos podría ser mucho mayor porque los enfrentamientos en Jartum impedían retirar los cuerpos en algunos lugares.
El Departamento de Estado dijo el lunes por la noche que Blinken había hablado por teléfono por separado con Burhan y con el líder de las RSF, Mohammed Hamdan Dagalo.