Chihuahua, Chih., Ejidatarios de los poblados Nuevo Saucillo, Nuevo Tampico y El Águila, municipio de Jiménez, a quienes la Comisión Federal de Electricidad (CFE) cortó la energía de sus pozos agrícolas el lunes y martes pasados, bloquearon ayer las carreteras 45D Jiménez-Camargo y federal 49 Jiménez-Torreón, además de que tomaron dos casetas de peaje para exigir una mesa de diálogo con los gobiernos estatal y federal. Además, mantuvieron cerradas vías ferroviarias en la cabecera municipal de Jiménez y la carretera libre a Camargo.
Los inconformes lograron una reunión con autoridades de la CFE y funcionarios estatales para negociar apoyos para el pago de adeudos pendientes desde los sexenios de los panistas Vicente Fox y Felipe Calderón.
Tras la reunión se reconectó el servicio eléctrico a los pozos de los labriegos. Arturo Rentería, dirigente de los campesinos, indicó que éstos demandan que en futuros diálogos participen autoridades chihuahuenses y federales para discutir el problema que tienen con la CFE por pasivos que datan desde el año 2000. “Ha habido mucha omisión de los gobiernos estatal y federal para atender a los ejidatarios, y se eliminó el subsidio para la energía de uso agrícola”.
Comentó que al volver a recibir energía eléctrica para sus pozos, los agricultores suspendieron sus manifestaciones en carreteras, “pero el bloqueo en las vías del ferrocarril sigue; si hay buenos acuerdos también lo levantaremos”.
Recordó que “el gobierno del estado (que encabeza la panista María Eugenia Campos) ofreció en febrero de 2022 negociar con la CFE y la Federación, pero no hemos visto respuesta. Nomás empezamos a apretar las acciones de protesta y el gobierno del estado platica con nosotros, pero no sentimos que tenga capacidad de solucionar el problema”.
Se amparan contra cortes
Productores agropecuarios de los municipios chihuahuenses de Cuauhtémoc, Guerrero y Namiquipa dieron a conocer que tramitaron amparos para impedir que la CFE suspenda el suministro a sus pozos agrícolas, y aseguraron que no pueden pagar la tarifa de cinco pesos por kilovatio.