Desde el comienzo de los paros estudiantiles, el 15 de febrero pasado, las autoridades de la Facultad de Artes y Diseño (FAD) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) han respondido a todas las exigencias de los alumnos en la medida de sus posibilidades y atribuciones, por lo que ya es viable y necesario regresar a clases regulares, aseguró el director del plantel, Mauricio de Jesús Juárez Servín.
En entrevista con La Jornada, el funcionario indicó que, contrario a lo que afirman los jóvenes en “paro autogestivo” –con clases, pero sin acceso a directivos ni administrativos–, los 17 puntos del pliego petitorio ya han sido respondidos desde el 20 de febrero, con observaciones y acciones en cada uno de ellos.
Entre los aspectos que ya se atendieron de forma inmediata están la ampliación de la capacidad del drive que los alumnos utilizan para almacenar tareas y trabajos, y quitar el “candado” al número de créditos para inscribirse a quinto semestre, puntualizó.
Sin embargo, hay otros aspectos que no dependen estrictamente de las autoridades de la FAD, como la apertura de más rutas de transporte público para llegar al plantel o la creación de más comedores con comida sana, el cual está en manos de la Dirección General de Patrimonio Universitario.
Juárez destacó que desde 2018 se ha tenido registro de 28 quejas formales por acoso sexual (14 de alumnos, 12 de profesores, una de trabajadores de base y otra de empleados de confianza), de las cuales todas han ameritado sanción, que va desde suspensión temporal, amonestación y tres rescisiones de contrato, y datan de la administración anterior.
“Los castigos no pueden ser una decisión unilateral del director, sino que deben estar fundamentados en el estatuto general de la UNAM, el contrato colectivo de trabajo y la propia Constitución. Son procesos largos, complicados, y a veces, aunque el director quiera sancionar, se enfrenta a problemas de carácter jurídico.
“Ellos (los estudiantes) mencionan que son muchos casos, pero son los que mencioné y ya están atendidos. ¿Cómo podemos actuar ante una denuncia anónima en la que no se presentan pruebas? Si alguna autoridad quiere suspender a un maestro así (sin quejas formales), nos van a demandar, como ha pasado en otros casos”, explicó.