Estudiantes de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) bloquearon ayer diversas vías de la ciudad en protesta por la suspensión de las Becas Elisa Acuña, mientras la máxima casa de estudios anunció que cubrirá dichos apoyos con recursos propios para no afectar las condiciones de vida y estudio de sus alumnos.
Luego de realizar una asamblea en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, alrededor de 200 jóvenes partieron en marcha a las 14 horas de dicha escuela, en medio de consignas como “¿y dónde están, y dónde están las pinches becas que nos iban a pagar?” También mostraron pancartas que decían “Mi beca no se toca” o “Sin becas, estudiar es un privilegio”.
Luego de pasar por diversas facultades, los estudiantes llegaron a la avenida Insurgentes Sur en su cruce con Eje 10. Cerraron esas avenidas desde las 4:20 hasta las 6 de la tarde, lo cual afectó la circulación tanto de autos particulares y transporte público.
Al término de la protesta, los participantes señalaron que los tres responsables del posible daño “a 55 mil estudiantes que perderán el apoyo” de la beca son la Cámara de Diputados por no etiquetar los recursos; la Subsecretaría de Educación Superior y las autoridades de la UNAM, a las que acusaron de administrar sus fondos con “ineficiencia y discrecionalidad”.
Tras retirar el bloqueo, los manifestantes regresaron hacia la estación del Metro Copilco, donde algunos jóvenes con el rostro cubierto rompieron vidrios y lectores de tarjetas de transporte. El resto del contingente siguió hacia la estación Universidad.
Poco después del inicio de la marcha de ayer, la UNAM aseguró en un comunicado que “con recursos propios, de la Fundación UNAM y donativos diversos, está en posibilidades de mantener la totalidad de los apoyos considerados en el programa de Becas Elisa Acuña y cubrir el monto asignado para cada uno de ellos, no obstante que en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2023 no fueron asignados recursos para dicho Programa”.
Luego de indicar que este mes dará a conocer mayor información, recalcó que para la institución “es una prioridad mantener los apoyos económicos que benefician a decenas de miles de alumnos y alumnas, sin los cuales sus condiciones de vida y su desempeño en el estudio se verían seriamente mermadas”.
Fuentes cercanas indicaron que de los 400 millones de pesos del programa de becas, en otros años la SEP puso 200 y la UNAM otros 200, por lo que ahora la máxima casa de estudios deberá aportar todo el monto original para sostener 110 mil apoyos.