Washington. El Departamento de Agricultura de Estados Unidos rebajó de nuevo su estimación de producción mundial de maíz y soya para 2023, principalmente por la sequía en Argentina.
El país, exportador clave en Sudamérica, registrará esta temporada su menor cosecha de soya en 23 años y tendrá la producción más baja de maíz en un lustro, por la falta de agua que ha diezmado sus campos.
La cosecha de soya de Argentina se estimó en 27 millones de toneladas y la producción de maíz en 37 millones de toneladas, según el informe mensual Estimaciones de Oferta y la Demanda Agrícola Mundial del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés).
Fue el cuarto mes al hilo en que el USDA bajó sus perspectivas para las cosechas de maíz y soya en Argentina, aunque el gobierno dejó sus pronósticos arriba de las estimaciones más recientes de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, que espera 25 millones de toneladas de soya y 36 millones de toneladas de maíz.
El informe recortó su proyección de la producción mundial de maíz en 3 millones de toneladas debido a Argentina, pero también a Europa, mientras la producción rusa debería compensar esos descensos.
La producción rusa de maíz aumentará en casi 2 millones de toneladas, a 15.83 millones, en 2023 en comparación con el año anterior.
La previsión de las existencias mundiales de maíz se reduce en menor medida, a 295.35 millones de toneladas, un millón menos que en marzo.
En cuanto a la soya, el impacto de la sequía argentina es más pronunciado. La estimación de la producción mundial se ha reducido en 5.5 millones de toneladas, a 369.64 millones, debido principalmente a la situación climática en Argentina.