La creación de puestos de trabajo registrados en el IMSS, la producción de vehículos en México, un consumo privado en el mercado interno resiliente y una producción industrial mejor a lo esperado, sugieren que la actividad económica del país ha tenido un arranque de año mejor de lo que pronosticó el consenso del mercado.
De acuerdo con los datos macroeconómicos conocidos hasta el momento sobre el primer trimestre de 2023, el año arrancó muy bien frente a la desaceleración que se reportó a finales de 2022, que se preveía como el inicio de la “temida” recesión económica.
En los primeros tres meses de 2023 se crearon 423 mil 384 empleos formales, lo que representó el número de trabajadores más alto registrados ante el IMSS para un periodo similar. Por su parte, las ventas de la industria automotriz se mantuvieron sólidas en el primer trimestre del año (24.4 por ciento anual); la producción de vehículos aceleró su crecimiento (8.62 por ciento), pero las exportaciones ralentizaron su expansión.
Asimismo, el consumo privado creció 1.6 por ciento mensual en enero de 2023, como lo hizo en diciembre. Con ello, se mantiene 5.8 por ciento arriba de sus niveles prepandémicos, siendo el mes que más arriba ha estado.
“El arranque de 2023 ha sido muy positivo, mucho más de lo que se pensaba, sobre todo considerando que a finales del año pasado se observó una desaceleración, que se empezó a considerar que era el inicio de la temida recesión económica de que tanto se ha hablado, pero la economía mexicana recibió un impulso en el primer bimestre del año, debido al buen desempeño de la actividad económica de Estados Unidos. Así como la apertura de China, tras su estrategia cero covid, a la vez se evitó la crisis energética en Europa, y el mercado laboral estadunidense ha mostrado resiliencia”, describió Janneth Quiroz, subdirectora de análisis económico de Monex.
Por su parte, Marco Oviedo, analista económico en la correduría brasileña XP Inc, resaltó que los datos macroeconómicos antes mencionados sugieren que la actividad económica mexicana va bien y está “caliente”, toda vez que resaltó que los salarios nominales en el sector privado en México aumentaron 10.3 por ciento en el primer trimestre de 2023, cifra que se compara con el alza de 8 por ciento de 2022, lo que juega en contra del descenso más rápido de la inflación.
Quiroz no comparte la perspectiva de que la economía mexicana se esté “calentando”, debido a que algunos indicadores empiezan a ralentizarse, como las exportaciones, que para febrero presentaron una desaceleración significativa. Se prevé que la economía mundial crezca más lentamente por las alzas en tasas de interés de los bancos centrales. Para la segunda mitad del año, pudiera haber cierta contracción.
“Los costos financieros también seguirán elevados durante algún tiempo. La desaceleración económica generalizada también restaría vigor a variables de respaldo, como la generación de empleo”, prevé Ángel Huerta, analista económico de B*+.