Luego de que a nivel nacional la actividad industrial creció 3.1 por ciento anual en términos reales en 2022, ésta mostró gran divergencia a nivel estatal el año pasado, toda vez que hay estados en los que ese renglón no se ha recuperado de la pandemia, reveló el indicador mensual de la actividad industrial por entidad federativa (Imaief) de diciembre de 2022.
Elaborado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, el Imaief estimó que la actividad industrial presentó un incremento anual en 18 entidades federativas en 2022 respecto a 2021, en tanto que declinó en las 14 restantes durante el periodo de referencia.
El contraste del desarrollo manufacturero estatal continuó. Por un lado, la actividad industrial de Oaxaca presentó el mayor crecimiento en 2022, con 55.3 por ciento al cierre de diciembre pasado; mientras Morelos registró una contracción anual de 25.5 por ciento.
La actividad industrial observó resultados favorables, particularmente en las manufacturas, favorecidas, en parte, por la demanda externa, con lo que algunas entidades del norte y centro del país prolongaron su dinamismo. Por otra parte, la continua recuperación en los servicios, vinculados al turismo impactó positivamente a entidades donde este sector tiene una participación relevante, detalló Guillermina Rodríguez, analista económica de Citibanamex.
Con respecto a las entidades con mejor desempeño industrial durante 2022, destacan Oaxaca, Quintana Roo, Chiapas, Ciudad de México, Hidalgo, Puebla, Guanajuato, Tabasco, con crecimientos anuales de 55.3, 28.4, 15.4, 13.2, 12.9, 11.3, 11.3, 9.3 por ciento, en el mismo orden.
En Hidalgo, por ejemplo, el repunte en la fabricación de productos derivados del petróleo contribuyó en gran medida al resultado, al tiempo que la industria alimentaria en Chiapas explicaría parte del desempeño de las manufacturas en la entidad. La industria manufacturera total representa menos de 6 por ciento del PIB en Chiapas. En Puebla, las cifras serían altamente atribuibles a la recuperación del sector automotriz.
Por su parte, la inyección de recursos públicos para la construcción de la refinería Dos Bocas en Tabasco y la recuperación de la actividad turística en Quintana Roo y Baja California Sur (6.1 por ciento su crecimiento industrial) explicarían el dinamismo de las economías locales, aseveró Rodríguez.