Entre el primero de enero de 2015 y el 5 de marzo de este año, la Secretaría de la Defensa Nacional aseguró 20 millones 703 mil 153 pastillas de fentanilo, y más de 3.3 toneladas de la misma droga a granel.
En el periodo referido, el Ejército decomisó 20 litros de este opioide sintético en estado líquido y 4 mil 677 ampolletas, la presentación más común para uso terapéutico.
La mayoría de las incautaciones se han registrado en los cuatro años recientes. Por la fecha de cierre del reporte, no se incluyó el aseguramiento récord del 12 de marzo pasado en Tijuana, Baja California, el cual se trató de un millón 834 mil 862 pastillas halladas en un inmueble de la colonia Colinas del Sol.
Del total de 453 decomisos reportados, la mayor parte se registraron en estados del norte el país. Baja California es líder con 157 eventos, seguido de Sonora con 146 y Sinaloa con 64. Le siguen Querétaro con 26, Chihuahua con 12, San Luis Potosí con igual número, Baja California Sur, 9; Nuevo León, 6 y Jalisco, 5.
Son estados donde los cárteles de Sinaloa y el Nueva Generación acaparan la importación de esta droga y sus precursores, su procesamiento para convertirla en pastillas y la exportación ilícita a Estados Unidos, donde su consumo ha sido calificado de “epidemia” y en 2022 causó la muerte de 106 mil personas, más de 290 al día, según estadísticas de los Centros de Control de Enfermedades.
“Estos dos cárteles mexicanos, el de Sinaloa y el de Jalisco, dominan la cadena de suministro global de fentanilo”, afirmó en febrero Anne Milgram, la directora de la agencia antidrogas estadunidense.
Ahora es común encontrar máquinas para hacer pastillas en los almacenes y laboratorios clandestinos de fentanilo asegurados por fuerzas federales. En junio, se incautó uno de estos artefactos, junto con 8 mil 500 píldoras, en Culiacán, Sinaloa, durante un operativo en el que fue arrestado Heibar Josué Tapia Salazar, cercano colaborador de José Guadalupe Tapia Quintero, alias El Lupe, uno de los principales colaboradores de Ismael El Mayo Zambada, quien heredó el control del cártel de Sinaloa luego de la captura de Joaquín El Chapo Guzmán.
El decomiso de fentanilo ha crecido mil 49 por ciento durante esta administración, aseguró el titular de Sedena, Luis Cresencio Sandoval González, a principios de marzo.