Familiares y amigos de dos mujeres desaparecidas en Michoacán se manifestaron la tarde del lunes frente a Palacio de Gobierno y luego marcharon a la Fiscalía General del Estado (FGE), para exigir a las autoridades resultados en las investigaciones, porque se han desentendido de su trabajo.
La protesta se llevó a cabo frente a la Fiscalía Especializada en Búsqueda de Personas Desaparecidas, donde señalaron que Alejandra Hernández Martínez, de 25 años, desapareció el pasado 22 de marzo después de que salió de trabajar en un restaurante de Pátzcuaro.
La víctima es madre de dos niños y la última vez que se le vio fue cuando salió del lugar donde laboraba como mesera. Dulce Martínez, hermana de la mujer ausente, declaró que sospecha de un amigo de Alejandra y de una pariente, pero en la fiscalía estatal no le hicieron caso. “Me traen a la vuelta y vuelta”, acusó.
El otro caso, es el de Paola Pérez, de 29 años, donde sus familiares piden a la FGE que investiguen su desaparición ocurrida el pasado 16 de marzo en Moroleón, Guanajuato –en los límites con Michoacán-, cuando la joven fue sacada de su domicilio violentamente.
La víctima del secuestro vivía en Morelia y fue a trabajar temporalmente en compañía de sus cuatro hijos, entre 11 meses y 14 años de edad y el principal sospechoso es su ex pareja, Edgar López Pérez, quien la golpeó en varias ocasiones y a decir de sus familiares, el sujeto es adicto a las drogas y el alcohol.