Dubái. La Marina de Estados Unidos desplegó en Medio Oriente un submarino equipado con capacidad para transportar hasta 154 misiles Tomahawk, informó un vocero ayer, en lo que parecía ser una demostración de fuerza hacia Irán luego de las recientes tensiones.
La armada rara vez reconoce la ubicación o la movilización de submarinos. El comandante Timothy Hawkins, vocero de la Quinta Flota, con base en Baréin, declinó realizar comentarios acerca de la misión del navío o los motivos de su despliegue.
El submarino de propulsión nuclear, con base en Kings Bay, Georgia, pasó por el Canal de Suez el viernes. “Tiene capacidad para transportar hasta 154 misiles de crucero de ataque terrestre Tomahawk y está (...) con la Quinta Flota para ayudar a garantizar la seguridad y estabilidad marítima regional”, apuntó Hawkins.
La Quinta Flota patrulla desde el crucial Estrecho de Ormuz hasta la boca del Golfo Pérsico por la que pasa 20 por ciento del petróleo mundial. En la zona están también el Estrecho de Bab el-Mandeb, frente a Yemen, y el Mar Rojo, que se extiende hasta el Canal de Suez, la vía navegable egipcia que conecta Oriente Medio con el Mediterráneo.
En los años recientes, Estados Unidos, Gran Bretaña e Israel han señalado a Irán de atacar a petroleros y mercantes, acusaciones que Teherán niega. La Marina estadunidense reportó además una serie de tensos encuentros en el mar con las fuerzas iraníes a las que calificó de innecesariamente agresivas.
Estados Unidos lanzó en marzo ataques aéreos contra las fuerzas respaldadas por Irán en Siria luego de que un ataque con proyectiles mató a un contratista estadunidense e hirió a otros siete en el noreste de ese país. Los Tomahawk que se disparan desde buques o submarinos pueden alcanzar objetivos a 2 mil 500 kilómetros.
Tensiones por Trump
Las tensiones entre Washington y Teherán aumentaron después de que el ex presidente estadunidense Donald Trump retiró al país del histórico acuerdo nuclear de 2015 entre Irán y las potencias mundiales, que aliviaba las sanciones económicas contra la República Islámica a cambio de la reducción de su actividad nuclear y de una vigilancia reforzada.
En otro tema, decenas de niñas resultaron nuevamente intoxicadas en varias escuelas en Irán, país sacudido desde hace más de cuatro meses por misteriosos envenenamientos de estudiantes, informaron medios locales.
Desde finales de noviembre, varios centros de estudio, en su mayoría de niñas, se han visto afectados por intoxicaciones repentinas causadas por gases u otras sustancias, que causan malestar y desmayos, a veces seguidos de hospitalizaciones.
En tanto, en un nuevo intento por frenar el creciente número de mujeres que desafían el código de vestimenta obligatorio, la policía iraní informó que instalará cámaras y otros “medios inteligentes” en lugares públicos para evitar la “tensión” y el “conflicto” por la aplicación de la ley que obliga al uso del hiyab (velo islámico).