La bancada del PRI en el Senado demandó a la Secretaría de Salud informar sobre las opciones para enfrentar la escasez de medicamentos con los que se tratan padecimiento psiquiátricos y neurológicos, ante la suspensión de actividades de la empresa farmacéutica Psicofarma, que era la única proveedora del gobierno federal.
La senadora Claudia Ruíz Massieu resaltó que la situación es complicada, porque después de la pandemia del Covid-19 se incrementó la demanda de atención médica psiquiátrica, y desde 2021 hay un “importante desabasto” en los medicamentos para ese tipo de afecciones.
Esta falta de fármacos se agravó en los últimos meses, explicó, y no sólo es exclusiva del sector público, sino también del privado, “afecta a miles de mexicanos cuya salud se pone en riesgo”.
Datos oficiales indican que los trastornos de ansiedad y depresión aumentaron en más de 25 por ciento durante el primer año de la pandemia 35 por ciento en el segundo, y llegó a 39 por ciento en 2022. Por ello presentó un punto de acuerdo para que la Ssa informe a través de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) cómo se resolverá el desabasto.