Chilpancingo, Gro., Resguardadas por el Ejército Mexicano y después de permanecer refugiadas dos días en la cabecera municipal de Tecpan de Galeana, en la Costa Grande, 34 familias que fueron desplazadas por la violencia en San Antonio de las Tejas, municipio de Coyuca de Catalán, regresaron a su comunidad.
El vocero de los pobladores, Homero Cortés, señaló que la decisión se tomó luego de que los gobiernos federal y estatal se comprometieron a instalar una base permanente de operaciones mixtas con elementos del Ejército, la Guardia Nacional y la policía del estado.
Explicó que el acuerdo fue firmado por el director general de Gobernación de Guerrero, Francisco Rodríguez Cisneros. En el documento, dijo, también se dispone la reapertura del centro de salud con suficientes medicamentos y el regreso de los maestros que huyeron por la inseguridad en el poblado.
Cortés relató que el grupo de casi 200 personas salió alrededor de las 13 horas del miércoles de Tecpan de Galeana en cuatrimotos y camionetas; recorrió en nueve horas poco más de 125 kilómetros, la mayor parte de terracería, y pasadas las 22 horas llegó a San Antonio de las Tejas.
El pasado lunes por la mañana, dichos pobladores se desplazaron a la cabecera municipal de Tecpan, debido a que desde el 7 de marzo de presuntos integrantes de La familia michoacana irrumpieron en la localidad y dispararon contra sus casas.
Desde ese momento expusieron al presidente Andrés Manuel López Obrador y a la gobernadora morenista Evelyn Salgado Pineda la demanda de construir en la zona una base de operaciones mixta, lo que finalmente fue aceptado.
Homero Cortés añadió que este jueves habitantes y autoridades de los poblados que integran el ejido de San Antonio de las Tejas se reunieron con los mandos militares y de la policía estatal que vigilarán el área.
De acuerdo con los lugareños, falta que regresen unas 400 personas que fueron desplazadas antes que ellos por la violencia en comunidades aledañas como Santa Clara, El Tigre, La Trinidad, El Durazno, Los Bayados, Bajos de Balsamar, Corrales y Guajes de Ayala, entre otras; “ellos tienen la misma necesidad de seguridad”, recalcaron.