Pekín. China puede desempeñar “un gran papel” para encontrar “un camino de paz” en Ucrania, afirmó ayer el presidente francés, Emmanuel Macron, al inicio de una visita de tres días a China.
“China propuso justamente un plan de paz (...) Se trata del deseo de tener una responsabilidad e intentar construir un camino hacia la paz”, dijo el presidente Macron ante la comunidad francesa, al elogiar su “coraje” tras las largas restricciones vinculadas a la pandemia del covid-19, que se levantaron a finales del año pasado.
La invasión rusa a Ucrania, que no ha sido condenada por Pekín, encabeza la lista de temas que Macron quiere abordar hoy con el presidente chino Xi Jinping.
“Esta guerra, que he calificado repetidamente de imperialista, de colonial, ha pisoteado de hecho muchos de los principios de la Carta de la Organización de Naciones Unidas, que nosotros, como dos miembros que somos del Consejo de Seguridad, debemos defender resueltamente”, dijo refiriéndose a Francia y China.
El diálogo con las autoridades de Pekín es “indispensable”, afirmó Macron, y no dudó en afirmar que el que apoye al “agresor” se convertirá en “cómplice” de una violación del derecho internacional, dijo en relación con una posible entrega de armas chinas a Rusia.
Macron, que no había estado a China desde 2019, quiso distanciarse del enfoque de confrontación diplomático de Estados Unidos en años recientes hacia su rival asiático.
“Cada vez se oyen más voces que expresan una fuerte preocupación por el futuro de las relaciones entre Occidente y China. Y en cierto modo llegan a la conclusión de que hay una espiral irresistible de tensiones crecientes”, indicó. “No quiero creer en este escenario”, afirmó.
Para mostrar la unidad de Europa en favor de un “compromiso” con China, Macron pidió a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, que lo acompañe hoy en una de sus reuniones con Xi Jinping.
McCarthy se reúne con la presidenta de Taiwán
En tanto, el republicano Kevin McCarthy, presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, recibió en California a la presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen, en un encuentro simbólico que irrita a China.
Pekín rechaza “firmemente” la reunión, advirtió esta semana la portavoz de la cancillería china, Mao Ning, quien agregó que su gobierno “defenderá con firmeza su soberanía nacional y su integridad territorial”.
En ese contexto, Japón anunció que empezará a brindar ayuda a ejércitos de “países afines”, en virtud de una nueva normativa anunciada ayer por el gobierno del archipiélago.