Ginebra. El Consejo de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas (ONU) exigió ayer que Rusia permita a las organizaciones internacionales visitar a niños y otros civiles “que fueron deportados” desde Ucrania a territorios bajo su control.
Instó a Rusia a “detener el traslado forzado ilegal y la deportación de civiles y de otras personas protegidas dentro de Ucrania o a la Federación de Rusia, en particular niños, incluidos los que están bajo custodia de las instituciones, no acompañados y separados” de sus familias.
El texto fue aprobado con 28 votos a favor, 17 abstenciones y dos en contra (China y Eritrea).
De acuerdo con Kiev, 16 mil 221 niños fueron deportados a Rusia hasta febrero, cifra que la ONU no pudo verificar.