Guadalupe Taddei Zavala, comisionada presidenta del Instituto Sonorense de Transparencia, será la consejera presidenta del Instituto Nacional Electoral (INE), resultado de una selección inédita por sorteo, ante la imposibilidad de un consenso entre los partidos políticos en la Cámara de Diputados. Por el mismo método del azar, serán consejeros electorales: Jorge Montaño Ventura, fiscal de Delitos Electorales de Tabasco; Rita Bell López Vences, ex consejera electoral de Oaxaca, y Arturo Castillo Loza, ex consejero electoral de Jalisco. Los cuatro formarán parte del Consejo General que conducirá la elección presidencial de 2024.
Sus nombres fueron extraídos de una tómbola –método que recomendó el presidente Andrés Manuel López Obrador para evitar “un enjuague” entre los partidos– y fueron cantados por el presidente de la mesa directiva, Santiago Creel Miranda (PAN). Los consejeros electorales insaculados ocuparán el cargo hasta abril de 2032.
Vencido el plazo para presentar a cuatro candidatos para suplir a Lorenzo Córdova, Ciro Murayama, Adriana Favela y Roberto Ruiz Saldaña, la Junta de Coordinación Política aprobó el mecanismo de selección y envió a la mesa directiva las cuatro listas con cinco candidatos cada una.
Según el convenio entre coordinadores, la mesa inscribió cada uno de los 20 nombres, en papeletas tamaño carta y en papel seguridad, que se guardaron en sobres, depositados a su vez en una urna, de la cual se extrajeron los nombres de los que automáticamente se convirtieron en consejeros.
La cámara tuvo que recurrir a la insaculación, prevista en la Constitución, ante el rechazo del Partido Acción Nacional (PAN) a negociar un pacto que propuso Morena, el cual pasaba por vetar perfiles y repartir cuotas entre partidos.
Durante el día, en un último intento por llevar la elección de consejeros al pleno por consenso, el coordinador de Morena, Ignacio Mier, ofreció al bloque Va por México –PRI, PAN y PRD– una distribución de consejeros según el peso de las bancadas, como se ha hecho de forma histórica, y en contraste con la sugerencia presidencial del miércoles.
No obstante, la oposición, en especial el blanquiazul, consideró que se trataba de una oferta desequilibrada, porque Mier planteó incluir tres candidatos propuestos por Morena y uno por la oposición, pero con la posibilidad de veto.
La oferta de Mier era, según diputados consultados, “de alto nivel”, pero fue rechazada por el coordinador del blanquiazul, Jorge Romero, a instancias del dirigente del partido, Marko Cortés, que incluso instruyó reventar la sesión. “Jorge sí quería jalar, pero Marko le ordenó que no”, comentaron legisladores.
Conforme al criterio legal que el director general de Asuntos Jurídicos de la cámara, Luis Genaro Vázquez, presentó a la Junta de Coordinación Política, la insaculación se realizó quinteta por quinteta, de las que el comité de evaluación le entregó el domingo pasado.
En el PT se expresó que no tenía sentido llegar a un acuerdo para presentar cuatro nombres a consideración del pleno, si la oposición estaba decidida a votar en contra.
Ventilar una lista que estaba destinada a ser rechazada, solo habría lastimado a los finalistas, sobre todo ante el ánimo panista de reventar la sesión, indicaron diputados petistas.