El peso está en un nivel sostenible; es decir, que va a cotizar debajo de 20 unidades por dólar, que es lo que los agentes económicos tienen en la cabeza como buenos niveles, o de una “relativa fortaleza”, afirmó Alexis Milo, analista económico.
“A pesar de que apenas estamos en marzo, no creo que cerremos el año arriba por 20 pesos por dólar, creo que veremos un tipo de cambio ordenado”, pronosticó Milo.
Durante su participación en el podcast Análisis Biva, el especialista explicó que el país tiene una fuerte entrada de dólares, a través de exportaciones, remesas y turismo, principalmente, y si a esto se le suma que el Banco de México tiene tasas de interés altas (11 por ciento, actualmente), entonces se dan todas las condiciones para que el tipo de cambio se aprecie.
“Como tal no hay un superpeso, más bien está reaccionando a la oferta y demanda (flujos de divisas); además se está regresando a niveles que perdió cuando el ex presidente de Estados Unidos, Donald Trump, amenazó con cancelar el tratado de libre comercio”.
Durante un tiempo el tipo de cambio en México no se regresó, después llegó la pandemia, la invasión militar de Rusia a Ucrania; es decir, expuso Milo, pasaron una serie de sucesos que no permitieron que el peso regresara de los niveles artificialmente depreciados que generó Trump de sus amenazas.
“Estamos observando que el peso está regresando a niveles muy débiles, lentamente, a lo que muchos le han llamado superpeso, porque tienen en la mente niveles de 22 pesos por dólar, que llegó a estar, o hasta 25 unidades en la pandemia. Hoy 18 o 19 unidades se nos hace un superpeso, pero es sólo que la divisa mexicana está recuperando niveles que tendría si no hubiera existido el problema con Trump.
“Hay algunas cosas que ayudan. La presente administración no ha tenido déficits, no hubo un programa de apoyo fuerte con la pandemia que generará deuda pública, como sucedió en otros países –todavía no se sabe si en el largo plazo será para bien o para mal–, pero todavía se percibe que en México hay orientación de mercado, socios de Estados Unidos y Canadá”, detalló el ex economista en jefe y director de análisis en HSBC México.