Tras las turbulencias en el sector bancario de semanas recientes, la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos aprobó ayer el noveno aumento consecutivo del costo del financiamiento, en este caso de un cuarto de punto, para combatir la aún elevada inflación (6 por ciento) y ubicar su tasa de referencia en un rango de entre 4.75 y 5 por ciento, su nivel más alto desde septiembre de 2007.
Las advertencias lanzadas por Jerome Powell, presidente de la Fed, sobre el impacto que puede tener la crisis bancaria en la economía estadunidense, mediante la restricción al crédito, llevaron a los mercados accionarios y cambiarios a aminorar las ganancias; incluso, Wall Street cayó con fuerza en los últimos minutos de la sesión.
El aumento de la tasa de interés fue apoyado por un fuerte consenso, describió Powell, aunque se consideró la pausa, al final los integrantes de la Fed decidieron subir las tasas en un cuarto de punto porcentual y señaló que no ha terminado el ciclo, pese al riesgo de exacerbar las turbulencias bancarias.
Indicó que algún aumento adicional del costo del dinero podría ser necesario. Los miembros del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, por sus siglas en inglés) recortaron sus pronósticos para 2023 del PIB (un crecimiento de 0.4 por ciento, en lugar de 0.5 por ciento que estimaron en diciembre), tasa de desempleo (4.5 por ciento), elevaron la previsión para la inflación (3.3 por ciento) y dejaron sin cambios los estimados para el nivel adecuado de los fondos federales (5.1 por ciento).
“Hasta el momento, la clave parece ser qué tanto el episodio reciente en el sistema bancario apretará las condiciones de crédito y cuál será su efecto sobre la actividad económica. El apretamiento per se puede llevar a que la Fed tenga menos trabajo que hacer en términos de aumentar las tasas”, aseveró Jessica Roldán, directora de análisis de Finamex.
Efecto en mercados
El mercado estima que el principal banco central del mundo pueda incrementar la tasa otros 0.25 puntos porcentuales en mayo, pero ya no llegará a 5.50 por ciento.
Sobre los últimos sucesos en los bancos se hizo hincapié en la solidez del sistema; se adelantó que podrían afectar a la actividad, el empleo y los precios, pero su efecto final es “incierto”.
Wall Street sufrió una volatilidad extrema los momentos posteriores al anuncio monetario y de la conferencia de prensa de la Fed. Los principales índices bursátiles estadunidenses han perdido terreno de manera brusca tras las advertencias lanzadas por Jerome Powell sobre el impacto que puede tener la crisis bancaria en la economía.
El S&P 500, el Dow Jones y el Nasdaq, de gran contenido tecnológico, cayeron 1.65, 1.63 y 1.6 por ciento, respectivamente, a 3 mil 936.97, 32 mil 30.11 y 11 mil 669.96 puntos, en ese orden.
La fuerza en el empleo estadunidense justificarían un ajuste adicional en la política monetaria, aunque sujeto a la evolución de los eventos en el sistema financiero.
El incremento de la tasa de referencia de Estados Unidos en un cuarto de punto porcentual mantuvo al peso mexicano en terreno positivo, aunque aminoró su fortaleza en la medida que se analizó que el principal socio comercial de México puede sufrir un coletazo económico por la restricción del crédito en Estados Unidos ante la inestabilidad del sector bancario.
El peso se apreció este miércoles 0.3 por ciento, equivalente a 5.56 centavos frente a la divisa estadunidense, para cerrar en 18.5658 unidades por dólar spot.
De acuerdo con datos del Banco de México, el tipo de cambio en el mercado interbancario operó entre un máximo de 18.5920 unidades y un mínimo de 18.3860.
El dólar se depreció 0.69 por ciento, a 102.192 unidades, según reporta el índice DXY, que mide su comportamiento frente a una canasta de seis monedas.
Por su parte, la Bolsa Mexicana de Valores registró una caída de 0.19 por ciento, para cerrar en los 52 mil 550.4 puntos, afectada por la caída del precio de las acciones de Azteca, 31.39 por ciento; Alfa, 2.06; Femsa, 4.28, y Grupo México, 1.05 por ciento, principalmente.
Acción espejo
“En México, la inflación subyacente, que excluye energéticos y agropecuarios, todavía no se desacelera con claridad, especialmente en el rubro de los servicios y su panorama exhibe riesgos al alza. Por otro lado, las acciones de la Fed presionan la posición relativa de las tasas en el país. Con todo ello, y considerando la reciente volatilidad financiera, estimamos que el Banco de México anuncie la próxima semana un incremento de 0.25 puntos porcentuales en la tasa objetivo”, prevé Alejandro Saldaña, subdirector de análisis económico de BX+.
En marzo de 2022, la Reserva Federal inició el proceso de restricción monetaria.