La selección mexicana inició la era de Diego Cocca con triunfo ante Surinam y lo hizo sin convencer. El Tricolor se metió ayer a Paramaribo y venció con muchas dificultades a los sudamericanos, por marcador de 2-0, en la penúltima fecha de la Liga de Naciones y en donde Santiago Giménez falló un penal.

El combinado nacional se presentó a la cancha con un cambio generacional notorio, y con Erick Gutiérrez fungiendo como el nuevo capitán del equipo.

Los primeros minutos fueron titubeantes. El equipo mexicano tardó en encontrarse en el terreno de juego frente a una selección que mostró valentía y buen futbol.

Christian Giménez, el nuevo referente al ataque, dio el primer indicio de peligro y el único que se le presentó al Tricolor en la primera mitad. El delantero del Feyenoord utilizó su altura para ganar un centro que fue bien atajado por el guardameta local.

No obstante, la mejor versión del conjunto sudamericano estaba por detonar. Probaron la cabaña de Carlos Acevedo con un disparo fuera del área. El guardameta de Santos Laguna, con una gran atajada, evitó la primera anotación (19’).

El mal accionar trajo consigo las primeras caras de nerviosismo desde la banca. Acevedo volvió a aparecer. Esta vez salvó un impactó cruzado y para este momento ya era la figura del partido.

Los surinameses, que aprovecharon el desconcierto de sus rivales, aparecieron una vez más por la vía que les funcionó, la larga distancia. Sheraldo Becker lo intentó y su disparo pasó rozando el poste.

Sin posesión de pelota y sin una idea clara de juego, México se dedicó sólo a correr. Las formas que prometió el seleccionador mexicano se habían quedado sólo en palabras.

Los dirigidos por Diego Cocca salieron con otra actitud y se sacudieron el nerviosismo en el complemento.

Surinam ya no fue tan incisivo y los aztecas explotaron la velocidad de sus laterales y extremos para empezar a hacer daño.

México encontraría el fondo de las redes gracias al balón parado. La mala exhibición se compensó con la anotación de Johan Vasquez (64), en un toque que apenas rozó el defensor, a pase de Charly Rodríguez, para abrir la pizarra.

Minutos después, la rapidez de Antuna fue factor determinante para que le cometieran un penal. Santiago Giménez, enrachado en Europa, pidió la pelota con serenidad, pero su cobro lo voló.

Chaquito, pese a fallar desde los once pasos, siguió insistiendo y, pese a no marcar, comenzó la jugada del triunfo. Mandó un pase filtrado a Roberto Alvarado y éste en su intento por recentrar, encontró una pierna enemiga, la de Damil Dankerlui, quien mandó la esférica a su propia portería.

México, con su triunfo, tomó la cima del Grupo A. Llegó a siete puntos, mientras que Jamaica, su próximo rival del domingo, contabiliza cinco, y los surinameses, que llegaban eliminados, se estancaron en una unidad.