Mexicali, BC., A punta de machete y cuchillo, el mixteco Eligio Hernández crea artesanías de madera en Punta Colonet, una comunidad agrícola entre San Quintín y Ensenada.
Originario de Santa María Arrazola, Oaxaca, cuna de los alebrijes tallados en madera, aprendió a elaborar las figuras de animales con características entremezcladas, de origen onírico y real, cuyas primeras piezas creó Pedro Linares, en 1936, a partir de sus sueños.
En cada pieza, el artesano tarda 20 días entre el corte y la talla de la madera, además de una semana para aplicar pintura de colores vivos que, según la tradición, sirven para la buena suerte y para alejar a los malos espíritus.
Daniel Sánchez, originario de la comunidad Unión de Cárdenas, Oaxaca, vive en San Quintín y se dedica a la pintura en conchas.
La artesanía indígena es una de las principales formas de transmitir la cultura y preservar la identidad de los pueblos originarios en Baja California, por lo cual la Secretaría de la Inclusión Social del estado abre espacios para preservar las tradiciones de estas comunidades y mejorar su economía, señaló su titular, Miriam Cano.
El Congreso de la Unión declaró el 19 de marzo Día Internacional del Artesano para dar visibilidad a lo que considera un baluarte cultural de México, una actividad que genera 479 mil puestos de trabajo remunerado y 21 mil establecimientos de venta. Una de cada 10 se encuentran en Jalisco, según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía.
Los artesanos de pueblos originarios asentados en Baja California producen alebrijes, hilados y chaquira y los venden en tianguis en las propias comunidades, aunque algunos los entregan a comerciantes de Ensenada o Tijuana.
En esta entidad del noroeste mexicano, 55.4 por ciento de quienes se dedican a esta actividad son hombres y 44.6 mujeres.
El Fondo Nacional para el Fomento de las Artesanías reconoce a estas personas que elaboran cosas con sus manos como artistas que con su actividad preservan conocimiento, costumbres y tradiciones.
De acuerdo con la Cuenta Satélite de la Cultura de México (CSCM), en 2021 las artesanías aportaron 153 mil 437 millones de pesos, 20.8 por ciento del sector cultural.
En la CSCM, la producción de artesanías se clasifica en alfarería y cerámica, fibras vegetales y textiles, madera, maque, laca, instrumentos musicales y juguetería; cartón y papel, plástica popular, cerería y pirotecnia, metalistería, joyería y orfebrería; lapidaria, cantería y vidrio, talabartería y marroquinería, así como alimentos y dulces típicos.
Las artesanías de fibras vegetales y los textiles están entre las actividades que generan más recursos.