Tel Aviv., Miles de personas se manifestaron en Israel ayer, por decimoprimer sábado consecutivo, contra la reforma judicial impulsada por el gobierno ultraderechista del primer ministro, Benjamin Netanyahu, que limita los poderes de la Corte Suprema.
Según los medios locales, que cifraron la concurrencia en decenas de miles, hubo marchas en más de 100 localidades, principalmente en Tel Aviv, Haifanorte, Jerusalén y Beerseba. En la capital, una multitud se congregó en la plaza Dizengoff con banderas israelíes y arcoíris de la comunidad LGTB+ para desfilar por el centro de la ciudad al grito de “¡Salven la democracia!”. En Herzliya, al norte de Tel Aviv, un hombre de 47 años arrolló con su vehículo a un grupo de inconformes, señaló la policía. Una persona fue detenida y otra debió ser hospitalizada tras ese incidente.
Durante la jornada, se produjeron intensos enfrentamientos entre las fuerzas del orden y los activistas en la localidad de Kfar Uriah, donde el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, pasaba las festividades religiosas del sabbat. En las arengas acusaron al funcionario por la falta de seguridad que “consintió” los enfrentamientos entre colonos israelíes y palestinos, además por el asesinato de Darya, una mujer en la localidad de Haifa, a manos de su marido pese a haberlo denunciado con la policía.
“¿Dónde estabas cuando fue asesinada Darya?”, corearon los manifestantes frente a la sinagoga donde estaba Ben Gvir, informó el diario The Times of Israel. La autoridad reportó la detención de un hombre que lanzó piedras contra la protesta y de dos manifestantes por el delito de desórdenes públicos y negativa a obedecer a un agente.
Yair Netanyahu, hijo del premier, comparó a los inconformes contra la reforma judicial con los “camisas pardas” nazis. “El proceso que está viviendo Israel es comparable al de Alemania en la década de 1930. Había matones a sueldo responsables de ‘terrorismo’ político en las calles”, comentó a la emisora Galey Yisrael.
Las protestas rechazan un proyecto judicial que permitiría anular decisiones de la Corte Suprema con una mayoría simple de 61 de los 120 legisladores. Algunas de sus disposiciones fueron aprobadas el martes en primera lectura en el Parlamento.
El gobierno de Netanyahu, el más derechista de la historia del país, argumenta que las reformas son necesarias para limitar la interferencia judicial. Sus detractores advierten en cambio que amenaza la democracia liberal al debilitar al Poder Judicial.
En este contexto, Yazan Omar Jasib, un palestino de 23 años, fue asesinado por disparos de militares israelíes cerca de la ciudad de Ramalá.