Ciudad de México. La puesta en escena La casa de Bernarda Alba, de Federico García Lorca (1898-1936), sigue vigente en un mundo convulso por la desigualdad social, la represión y el fanatismo.

En el aula magna del Instituto Cultural Helénico se escenifica la última obra del dramaturgo español, y una de las que más se monta en el mundo, bajo la dirección de José López, quien conversó con La Jornada.

“Está cargada de símbolos y de temas muy importantes. Lorca, como poeta revolucionario, se adelantó a esa lucha que las mujeres sostienen por la libertad, la equidad. Su historia es un detonante frente a una sociedad conservadora y a lo que hoy vivimos con el movimiento feminista, del cual trato de mantenerme al margen como varón, pero comparto sus ideas.

“En la obra vemos el machismo, el patriarcado que domina dentro de la casa y que son costumbres que fueron deteriorando el tejido social. Está presente el tema de la búsqueda de libertad por tanta represión y Lorca dejó esa semillita en su obra.”

En La casa de Bernarda Alba destacan rasgos de la España de principios del siglo XX, caracterizada por una sociedad tradicional muy violenta donde el papel de la mujer es secundario. También están el fanatismo religioso y el miedo a descubrir la intimidad.

Bernarda, una viuda, somete a sus cinco hijas a un luto asfixiante tras la muerte de su segundo esposo. Con la pérdida se va la libertad y la vida se vuelve abrumadora. Los instintos, la moral, la religión y las pasiones irán tejiendo una trama inesperada en la que el público podrá verse envuelto.

José López decidió adentrar al espectador en la historia como especie de teatro inmersivo, ya que está dentro de la obra.

“Con algunos elementos decidimos que el público se sintiera adentro de la casa, que fueran nuestros huéspedes y experimentaran lo que se vive en la trama”, indicó el director.

El espacio que el Instituto Cultural Helénico ofrece es perfecto para llevar a cabo una estrecha relación entre el actor y los expectadores: “Se van a sentir realmente como invitados en la cena y en todo el drama. Parte del público tendrá oportunidad de disfrutar sabores, aromas, texturas. Es una puesta muy distinta”, añadió.

Prueba de actuación

Sobre el elenco, expresó: “Buscamos perfiles para que trabajaran con el personaje no sólo de manera física, sino emocionalmente. Queríamos que cada uno se sintiera a gusto con su personaje que ya está delineado y no hay mucho que le pueda cambiar”.

En el montaje alternarán funciones Martha Tron, Alexandrina Carballido, Adriana De la O, Cintia Torres, Lety Evia, Fátima López, Sophie Rangel, Itzel Soto, Julieta Manjarrez, Erika Ward, Mariana Ramos, Maru Estrada, Daniela Yepez, Jimena Manjarrez, Ana Lucía Tron, Melissa Corral, Francisco Mar Olascoaga y José López.

Martha Tron, quien da vida a Bernarda, explicó que ese personaje es como una graduación para cualquier actriz, por tratarse de un trabajo que se ha montado en todo el mundo.

“Ella se ve como la mala de la historia, la madre represora, pero fue un reto pensar en su parte humana porque al final sus acciones son resultado de una sociedad represora, del machismo, de todas estas circunstancias que ella no quisiera vivir, pero que se ve obligada a hacer.

“Muere el marido y tiene que hacerse cargo de todo lo que debería tocarle al hombre. El significado de su nombre es fuerza de oso y ella carga con todo esto. Es parte del reto convertirla en un ser humano que también sufre y actúa así como por las situaciones que la presionan y que le tocó pasar.”

Refirió que Lorca vivió la represión en muchos sentidos y en su obra está esa búsqueda de libertad ante esto y el fanatismo religioso, el deber ser que se plantea en la obra.

“Hablamos de mujeres encerradas en una casa que no tienen contacto con el mundo, y el contacto lo hacen por intermediarios, la criada. Bernarda se impone un luto eterno y hay reglas que ella y las hijas deben seguir, sobre todo la pequeña, tienen el deseo de ser libres.”

El montaje La casa de Bernarda Alba se presenta hasta el 26 de marzo en el aula magna del Instituto Cultural Helénico (avenida Revolución 1500, colonia Guadalupe Inn), los viernes a las 20 horas, sábados a las 18 y 20 y domingos a las 18 horas.