El gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador está dispuesto a profundizar la cooperación con Estados Unidos en el combate al narcotráfico, pero basado en el respeto y no en ofensas o amenazas, advirtió Roberto Velasco Álvarez, jefe de la Unidad para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores.

En el Senado, el funcionario rechazó la declaración del Congreso estadunidense de que en México no se hace nada para frenar el tráfico de fentanilo.

No se puede aceptar una afirmación en ese sentido, “cuando al menos 75 elementos de las fuerzas armadas de nuestro país han perdido la vida en esa lucha, comentó durante una reunión con integrantes de las Comisiones de Relaciones Exteriores y de Relaciones Exteriores para América del Norte, que presiden los senadores Héctor Vasconcelos y Ginna Cruz Blackledge.

“Con qué cara podríamos voltear a ver a las familias de esas personas que perdieron la vida si aceptamos que se diga que no estamos haciendo nada y eso por supuesto no lo podemos hacer, es completamente inaceptable”, recalcó el funcionario, quien les entregó un informe.

Explicó a los legisladores que México no es productor de fentanilo, sino un país donde se acondiciona y envasa esa droga, tal como ocurre con las vacunas anticovid, que se producen en Argentina, Estados Unidos o Rusia y aquí solo se alista para su comercialización.

El tráfico de fentanilo y precursores, insistió, provienen fundamentalmente de Asia y hasta el momento no se tiene registro de producción o síntesis de esa droga en México, “lo que ocurre en nuestro país es lo que es conocido en términos comerciales como el proceso de ‘fill in finish’, llenado o terminado”.

Si en Estados Unidos “tienen evidencia de lo contrario, tenemos las instancias para compartir esa inteligencia, cosa que no se ha hecho hasta el momento”.

El jefe de la Unidad para América del Norte de la cancillería explicó asimismo a los legisladores que el gobierno mexicano “ha hecho esfuerzos sin precedentes en el decomiso de fentanilo”. En la actual administración, agregó, ha crecido más del mil por ciento, ya que del 1 de diciembre de 2018 hasta el 6 de marzo de este año, se aseguraron más de seis toneladas, lo que equivale a tres mil millones de dosis letales que México ha sacado del mercado.

El funcionario expuso que México exige a Estados Unidos reciprocidad y que emprenda acciones concretas para frenar el tráfico de armas a nuestro país.

“¿Por qué si nosotros hemos perdido tantas vidas en el combate al tráfico de drogas hacia el norte, Estados Unidos no va a dedicar recursos a combatir el tráfico de armas a nuestro país? ¿por qué si nosotros hemos destinado históricamente miles o decenas de miles o cientos de miles de millones de dólares al combate del narcotráfico hacia Estados Unidos, Estados Unidos no va a dedicar una cantidad proporcional también al tráfico de armas? Aceptar esa realidad sería aceptar una relación en la cual México no tuviera derecho a plantear sus prioridades y a recibir un trato entre iguales”, resaltó.

Durante el encuentro, senadores de Morena y de otras fuerzas políticas plantearon un encuentro con congresistas de Estados Unidos para aclarar dudas sobre la batalla que el gobierno mexicano ha emprendido contra la delincuencia y así evitar amenazas de una eventual intervención militar en el país.